La trigésimo segunda edición de la Feria agroganadera de Trujillo se ha celebrado en la institución ferial Ferex de la localidad cacereña bajo una sensación general de éxito.
La Agroganadera de Trujillo se ha celebrado en esta ciudad cacereña, durante la cual se han celebrado varios concursos morfológicos de ganado, y en la misma se han dado cita más de 1.200 cabezas de distintas razas.
En el acto de inaguración de la feria el alcalde de Trujillo, Alberto Casero, explicó que el certamen ha logrado crecer en los últimos cuatro años, pues ha pasado de 200.000 euros de facturación en 2012 a 240.000 euros en 2013 y 278.000 euros en la última edición. Este crecimiento ha sido posible gracias al establecimiento de subvenciones por parte de la Junta de Extremadura para la compra de ganado, un factor que ha animado “de una forma decisiva y valiente a los ganaderos en los últimos años” y que en la presente edición han ascendido a 85.000 euros.
El certamen ha acogido la segunda edición del concurso morfológico nacional caprino de raza verata, único de la feria incluido en el calendario oficial del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Por su parte, el ganado caprino ha estado representado por las razas Florida, Verata y Malagueña, como novedad de la feria. De la raza Verata han acudido 110 ejemplares -25 machos y 85 hembras-, con un protagonismo especial en la Agroganadera de Trujillo.
También se han celebrado concursos morfológicos de vacuno de la raza Avileña Negra Ibérica y Charolesa, así como de Limusina.
En su participación en la feria, la consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio de la Junta de Extremadura, Begoña García Bernal, confirmó que antes de que acabe el mes de noviembre más de 8.000 agricultores extremeños percibirán 25 millones de euros en concepto de segundo anticipo de la Política Agraria Comunitaria (PAC). García Bernal realizó este anuncio en la inauguración de las jornadas técnicas dedicadas a las enfermedades de declaración obligatoria, aplicación de la PAC y planes de desarrollo rural.
La titular de Agricultura avanzó que a finales de diciembre se asignarán los derechos provisionales a los agricultores, y confirmó que en abril de 2016 los profesionales del campo sabrán qué les ha supuesto la reforma de la PAC. En esa fecha la Junta estará en disposición de saber las repercusiones de la negociación con números reales, y en abril se realizará una valoración con datos reales y un balance de su primer año de aplicación.
En estas mismas jornadas técnicas la directora general de la PAC de la Junta de Extremadura, Yolanda García Seco, confirmó que dentro de unas semanas se conocerá el cálculo de los derechos provisionales de pago básico de cada agricultor, y por tanto recibirán el pago final de la campaña de 2015, además del abono de algunas ayudas acopladas.
Asimismo avanzó que en diciembre se abonarán 500 millones de euros en concepto de pago básico y pagos acoplados, que en enero se abonarán las primas ganaderas al vacuno y en marzo las ayudas destinadas al sector ovino.
En cuanto al Programa de Desarrollo Rural 2014-2020, que en estos momentos está en fase de aprobación por parte de la Comisión Europea, García Seco explicó que supondrá para Extremadura una inversión aproximada de 1.000 millones de euros, que permitirán ayudas especificas para el sector ganadero y otras destinadas a la incorporación de jóvenes agricultores, mejoras en explotaciones, incentivos agroindustriales, ayudas a la ganadería extensiva de calidad, ganadería ecológica, trashumancia o al mantenimiento de razas en peligro de extinción, entre otras.
Por su parte, la jefa de servicio de Sanidad Animal de la Consejería de Agricultura de la Junta de Extremadura, Cristina Sanz, manifestó que el verdadero problema de la enfermedad de la lengua azul son los riesgos que llegan de áreas limítrofes a nuestra región, como los focos detectados en Andalucía y Portugal. “Estamos en zona de riesgo y se está vacunando a los animales frente a los dos serotipos” en una comunidad en la que hay registrados 800.000 cabezas de bovino y 3.000 de ovino que serán sometidas a un proceso de vacunación. En 2015 se han destinado tres millones de euros para la compra de vacunas y en 2016 se procederá a la revacunación de los animales, lo que supondrá un desembolso cercano a los tres millones de euros.
Sanz precisó que en los últimos años se ha registrado un fuerte incremento de la tuberculosis bovina, y confirmó el repunte de esta enfermedad que afecta al vacuno principalmente, pero también a especies cinegéticas de caza mayor como el jabalí o el ciervo. Para controlar el brote se han invertido 11 millones de euros en trabajos de campo y en indemnizaciones.
La subasta de bovino celebrada en la feria generó un volumen de negocio de 126.310 euros y logró adjudicar el 56% de las cabezas de ganado. Los ganaderos presentaron a subasta 144 ejemplares de distintas razas, 80 hembras y 64 machos, que en muchas ocasiones lograron superar el precio de arranque en una puja concurrida que llenó el salón de actos de la institución ferial Ferex de Trujillo. Las razas presentadas a subasta fueron Asturiana de los Valles, Retinta, Parda de Montaña. Avileña Negra Ibérica, Limusina y Charolesa.
La más concurrida fue la puja de Avileña, que presentó 68 cabezas de ganado y generó un volumen de negocio de 36.810 euros. La raza Limusina fue la que más ingresos generó, al alcanzar una cifra de negocio de 48.900 euros, seguida de la Avileña Negra Ibérica y la Charolesa.
El ejemplar mejor cotizado en la puja fue un toro de 17 meses de edad de raza Limusina propiedad de la ganadería de Mario García Jiménez, de El Barco de Ávila, que salió con un precio de arranque de 3.500 euros y alcanzó una cotización de 5.000 euros. De la misma raza, un toro de 25 meses de edad de la ganadería de Regúlez Artetxe, que salió a subasta con un precio de arranque de 4.400 euros y se adjudicó por 4.900 euros.
Por su parte, la subasta de ovino generó un volumen de negocio de 113.835 euros y logró adjudicar el 97% de los lotes de hembras de la raza merina y el 82% de los machos. La subasta superó la cifra de negocio y los porcentajes de adjudicación de la pasada edición, con una puja rápida en la que salieron a la venta 333 hembras de la raza merina dividas en 35 lotes, de los que lograron adjudicarse todos excepto uno, que fue declarado desierto.
La puja de hembras merinas generó una facturación de 45.520 euros tras la venta de 323 cabezas de ganado calificadas con una categoría buena o muy buena y varios lotes alcanzaron un precio de remate de 2.000 euros. Salieron a subasta 34 machos, que movieron 7.460 euros en la subasta tras la adjudicación de 28 de ellos, lo que supone el 82% del total. En la puja solo quedaron desiertos seis ejemplares. A la cifra de negocio de la subasta hay que añadir 60.855 euros de la venta de ejemplares de la raza merina precoz que fueron adquiridos mediante compra directa.
El presidente del comité ejecutivo del certamen, Manuel González Álvarez, realizó un “balance muy positivo” del certamen y consideró que el buen tiempo registrado ha animado a los ganaderos y ha propiciado “una afluencia de público masiva”.
También indicó que la organización ha advertido una importante preocupación entre los ganaderos de vacuno por la transmisión de enfermedades como la tuberculosis bovina, motivo por el que se han organizado jornadas técnicas profesionales que han contribuido a proporcionar información eficaz que contribuya a prevenir y erradicar la enfermedad.
Para González Álvarez la feria ha cerrado sus puertas con “unos volúmenes de ventas muy similares a los del año pasado”, pues a los más de 240.000 euros generados en las subastas de vacuno y ovino hay que añadir un número importante de transacciones comerciales realizadas de forma directa entre los ganaderos.
