La cámara legislativa regional ha celebrado la sesión constitutiva con la que se inicia la X Legislatura, en la que Blanca Martín ha sido reelegida en el cargo de presidenta de la Asamblea.
La sesión comenzó con la designación de los componentes de la Mesa de edad, que estuvo presidida por la diputada del PSOE María Ángeles Camacho (65 años), y actuaron como secretarios la diputada de Ciudadanos Marta Pérez (31 años) y el diputado del PP Javier Cienfuegos (28 años).
Una vez designados sus miembros, la presidenta de la Mesa de edad tomó la palabra para declarar abierta la sesión y, a continuación, el secretario de menor edad leyó el Decreto de convocatoria, la relación de diputados electos por orden alfabético, dejando constancia de los presentes, así como los recursos contencioso-electorales en su caso interpuestos.
Seguidamente, los diputados y las diputadas prestaron juramento o promesa de acatar la Constitución y el Estatuto de Autonomía, comenzando por la presidenta y los secretarios de la Mesa de Edad y, con posterioridad, el resto de los diputados y de las diputadas, por orden alfabético. Cumplido este requisito, se procedió a la elección de la Presidencia y del resto de los miembros de la Mesa, conforme al procedimiento establecido en el Reglamento de la Cámara. Fueron designados Miguel Ángel Morales, del PSOE; y Fernando Manzano, del PP, como vicepresidente primero y segundo respectivamente. Por su parte, María Ángeles Camacho, del PSOE; Inmaculada Sánchez, del PP; y Fernando Baselga, de Ciudadanos, ocuparán las secretarias primera, segunda y tercera de la Mesa, respectivamente.
Elegidas la Presidencia y la Mesa de la Cámara, y tras ocupar sus miembros los escaños correspondientes, Blanca Martín declaró constituida la Mesa y la Asamblea de Extremadura.
A continuación, la presidenta de la Asamblea tomó la palabra ante los diputados y las diputadas, y declaró que asumía el cargo “con ilusión, responsabilidad y agradecimiento, y con voluntad de diálogo y búsqueda de acuerdos y sentido de la responsabilidad”. Asimismo, afirmó ser una “mujer extremeña orgullosa de ser mujer y que cree en la igualdad de género por encima de todas las cosas”.
Por otro lado, convocó a los diputados y a las diputadas a “debatir hasta la última coma, pero que fuera de aquí seamos una sola voz, la voz del pueblo extremeño”. “Alcemos la voz para sumar matices y mejorar nuestra visión de esta región y su convergencia en un mundo cada vez más voraz con los débiles”, incidió.
Por último, Blanca Martín subrayó que la presente legislatura “no debe ser la de la uniformidad de una mayoría absoluta, ni la del grito de las minorías parlamentarias”. “La Cámara deberá seguir además abierta de par en par a todas las peticiones de las personas que quieran consultarnos, porque la ciudadanía debe sentirse representada en las formas y en el fondo”, añadió. “Estoy convencida de que la Asamblea de Extremadura será, más que nunca, de las personas”, concluyó.
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