La Red solidaria de jóvenes de Entreculturas defiende el derecho a la educación a nivel mundial

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Las firmas se entregarán a la representación política española que asista a la Asamblea de la ONU en septiembre, donde se adoptarán los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible para los próximos 15 años.

Más de 60 jóvenes y docentes de distintos centros educativos de la región se dieron cita en Badajoz ara celebrar la V Asamblea de final de curso de la Red solidaria de jóvenes de Extremadura. En este marco, una de las acciones más destacadas de este día fue sensibilizar a la ciudadanía de Badajoz para que el Derecho a la Educación sea una prioridad a nivel mundial.

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En septiembre de 2015 la comunidad internacional revisará en la Asamblea General de Naciones Unidas los Objetivos de Desarrollo del Milenio adoptados en el año 2000 y decidirá los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible para los próximos 15 años. Esta revisión pondrá de manifiesto que en educación hay retos todavía muy desafiantes.

En concreto 58 millones de niños no tienen acceso a la educación, 250 millones de niños se ven excluidos de su derecho a recibir una educación de calidad y no aprenden a leer, escribir o a realizar operaciones matemáticas simples y 775 millones de adultos, dos tercios de ellos mujeres, son analfabetos.

La Red solidaria de jóvenes (RSJ) es una propuesta educativa que la oenegé Entreculturas promueve con los centros educativos, en los que jóvenes de 12 a 18 años acompañados de su profesorado reflexionan y desarrollan actitudes de compromiso y solidaridad tanto en sus entornos más cercanos como con las situaciones de injusticia y desigualdad que se producen en nuestro mundo, desarrollando sentimientos de pertenencia a la comunidad local y global.  Desde esta conciencia y el deseo de los jóvenes de participar y comprometerse se unen a esta iniciativa que Entreculturas está promoviendo en distintas ciudades de nuestro país.

La RSJ y Entreculturas han pedido a la ciudadanía que se unan en su reivindicación del papel de la educación en la nueva Agenda de Desarrollo para que el derecho a una educación de calidad equitativa, inclusiva, a lo largo de toda la vida y para todas las personas en el mundo se incluya entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible que apruebe la comunidad internacional. Es por ello que jóvenes y profesorado bailaron en el Parque San Francisco a las 13.oo horas una coreografía que simbolizó la importancia de la educación para las personas, y en una hora recogieron más de 500 firmas que se suman a las más de 4.000 recogidas en Extremadura en los últimos meses. Se pretende recoger 25.000 firmas apoyando esta petición, que se entregarán a la representación política española que asista a la Asamblea de Naciones Unidas de septiembre.

Además de esta acción, el resto del día los jóvenes han compartido y revisado el trabajo que han desarrollado en sus centros educativos durante este curso. Sus agendas solidarias del año han estado centradas en la defensa de los derechos económicos, sociales y culturales. Han sido múltiples las actividades realizadas para cambiar las cosas que no les gustan de sus centros educativos, barrios o pueblos, y del mundo. Entre las acciones realizadas destaca un proyecto compartido con una red de jóvenes estudiantes de Colombia, en el que han analizado el problema de la inmigración y emigración y han promovido una cultura de la acogida y la hospitalidad.

Una larga lista de acciones y un tono esperanzado lleno de música y color que demuestra que los jóvenes no están parados y que vienen pegando fuerte porque creen que “todas las personas podemos poner nuestro granito de arena para hacer este mundo mejor y nosotras lo hacemos desde la Red” y porque “demostramos a los demás y a los mayores que sí se puede cambiar la realidad, sí se puede construir un mundo más justo”.