Gracias a la labor de este equipo en localidades como Olivenza, Badajoz y Don Benito se están realizando avances en la inserción laboral de discapacitados intelectuales.
Este equipo ha sido puesto en marcha por el Servicio de Orientación, Formación e Inserción Laboral (Sofil) de Plena inclusión Extremadura, y hasta la fecha han conseguido varios casos de éxito en la inserción laboral de personas con este tipo de discapacidad. En Olivenza, prestan apoyo a Manolo Gómez, de Plena Inclusión Extremadura Aprosuba-14, quien ha conseguido unas prácticas no laborales en la Casa de la Misericordia. En Badajoz, la usuaria de Aexpainba Eva Jiménez, realiza unas prácticas en Kiabi Badajoz. Nuria Cidoncha, de Plena Inclusión Don Benito, hace sus prácticas en Grupo 15.
Está previsto que próximamente se incorpore otro preparador laboral en Cáceres, que prestará atención a una persona con discapacidad intelectual o del desarrollo de Aspainca, para que inicie sus prácticas no laborales en Aki Bricolaje Cáceres.
Estos preparadores acompañan a las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo durante su periodo de prácticas durante toda la jornada laboral. Además de proporcionar apoyo durante el desempeño de las funciones del puesto, el preparador ayudará al trabajador a desarrollar sus habilidades sociales, para así mantener su empleo y fomentar su autonomía. Este proceso tiene un seguimiento de forma coordinada entre la empresa, el Sofil y la familia del trabajador.
Esta actividad se incluye dentro del programa de Apoyo de Inserción Laboral para Personas con Discapacidad Intelectual, financiado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, con cargo a la asignación tributaria del 0’7 por ciento del IRPF.
