Sin Juicio

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Neandertal JCP
Siempre me preocupó la salud y el aspecto físico, el cuerpo es el coche con el que nos movemos. Cuando nuestro automóvil está viejo, lo vendemos y compramos otro, pero eso mismo no lo podemos hacer con el cuerpo.
Nunca tuve dudas de que lo biológico influye en todo y que es nuestra responsabilidad mantener a punto nuestros vehículos.
No todos tenemos la misma suerte, a unos les toca con un chaxis impresionante, otros son entregados sin alguna pieza o con defectos de fábrica. No sirve de nada realizar una queja, la fábrica no atiende reclamaciones; te toca y( aunque suene duro) te jodes.
Personalmente, no me puedo quejar, mi vehículo funciona bastante bien a pesar de los años que tiene y de los kilómetros que le he hecho recorrer por toda clase de caminos.
Cierto es que siempre procuré darle el mejor combustible y mantenerlo más o menos limpio; algunos humos y alcoholes( nunca en exceso) antaño,  y ahora, nada de aditivos insanos.
Hace muchos años que no tengo ni una décima de fiebre, ni una avería de la maquinaria; nada.  Me recupero de las intervenciones quirúrgicas de manera extraordinaria, me cicatrizan rápidamente  las cicatrices del cuerpo y del alma. Un compañero de instituto me dijo hace poco que yo era una mutante y me acordé del doctor Torres.
Acababa de dar a luz a mi segundo hijo, Carlos. Me dolía la boca, pero no se veía ni una caries. Fui al dentista, que al no ver la causa del dolor, pidió una radiografía.
Al darme los resultados, dijo muy ceremonioso:
– Enhorabuena, señora. Es usted uno de los seres más evolucionados de la especie. No tiene ninguna de las cuatro muelas del juicio.
Como ya sabemos de los 16 a los 26 años, las conocidas como muelas del juicio pueden erupcionar. Son los terceros molares y, con frecuencia, el maxilar no dispone de espacio suficiente para albergarlos, por lo que el dentista debe proceder a extraerlos para que no se produzca un apiñamiento de los dientes. Los especialistas creen que estas piezas dentales están en proceso de desaparición por causas evolutivas, ya que son un vestigio de nuestros antepasados que los necesitaban para triturar los alimentos crudos. La alimentación actual resta utilidad a las muelas del juicio, por tanto, y según la teoría de Lamark, mis muelas han desaparecido.
¿ Tendrá mi cuerpo algún rasgo evolutivo más?
Julia Cortés Palma