Miriam Casillas. La reina del triatlón. Grada 92. Perfil

Léelo en solo 7 minutos !!

A sus 23 años, la triatleta natural de Badajoz tiene un palmarés realmente envidiable, y su máximo objetivo es obtener el pase a los próximos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

Felipe Ferrín
Fotos: Eduardo Sierra

Campeona de España de duatlón absoluta y sub23, campeona de España de triatlón absoluta y sub23, subcampeona del Mundo de duatlón sub23, y subcampeona Iberoamericana absoluta de triatlón son algunos de los triunfos que más brillan en su historial. Miriam Casillas lleva la bandera extremeña por todo el mundo, actualmente compite en las Series Mundiales de triatlón y ha conseguido hacerse un hueco entre las mejores atletas españolas de este deporte.

La primera pregunta es obligada; ¿cómo llegas al triatlón?
Empecé a hacer triatlón más que nada por recomendación médica, mi hermano y yo teníamos un poco de escoliosis y nos aconsejaron hacer sobre todo natación. A mí siempre me había gustado el deporte al aire libre, mi familia lo ha practicado mucho y, por ejemplo, solía salir con mi padre con la bici por la montaña. Mi idea no era estar todo el día en una piscina, quería hacer otros deportes, nos enteramos de que había un club de triatlón en Badajoz y nos apuntamos mi hermano y yo.

¿En qué momento el triatlón deja de ser una simple terapia médica para convertirse en tu vocación profesional?
Creo que no hay un momento concreto en el que decido tomármelo como algo profesional. Con el paso del tiempo voy creciendo como deportista y, sin apenas darme cuenta, estaba dedicándole la mitad de mi tiempo al deporte. Si tuviese que elegir un momento, seguramente sería a los 18 años, cuando acabé el instituto y decidí hacer Medicina en Madrid para poder entrenar en el Centro de Alto Rendimiento de la capital con la Federación Española de Triatlón. Seguramente ese fue el momento del cambio.

A partir de ese momento los triunfos se suceden y el nombre de Miriam Casillas se hace grande en el triatlón.
Cuando llegué a Madrid fueron demasiados cambios juntos. Comencé a vivir sola, tenía que afrontar una carrera complicada como es Medicina y las horas de entrenamiento se alargaban mucho más. La verdad es que el primer año, incluso los dos primeros, fueron complicados. Hablé con el seleccionador y me ayudó a tomar una decisión que, a la larga, fue muy acertada, centrarme en mi hándicap, la natación. Aunque tocaba las otras dos disciplinas estuve muy centrada en la piscina y eso me ayudó mucho a ser lo que soy hoy en día. Seguramente eso fue lo que me ha hecho dar el salto a las competiciones internacionales y conseguir todos esos triunfos de los que hablas.

¿Cómo afronta la familia de una joven deportista internacional de élite todos estos cambios?
Mi familia siempre ha sido muy importante para mí. Primero porque, como digo, en mi casa siempre se ha practicado mucho deporte y, segundo, porque siempre me han apoyado en todas mis decisiones y me han acompañado en todas las competiciones. Es dura la distancia y estar poco tiempo en tu casa, pero la verdad es que mi familia siempre me ha ayudado mucho con su apoyo y sus ánimos.

Competir en el deporte internacional de élite desde tan joven seguro que te hace crecer como deportista, ¿pero también te ayuda a madurar y crecer a nivel personal?
Realmente no sé si estar fuera de casa es positivo o negativo. Yo diría que tiene muchas cosas buenas, porque si estás siempre en el mismo lugar no tienes opción a la comparación, a aprender, a ver cosas nuevas y diferentes. A mí me gusta mucho ver cómo se entrena en otros países, las técnicas y estrategias de otros continentes y creo que es muy satisfactorio a nivel deportivo y personal. Al igual que la incomparable sensación de volver a tu casa, a tu ciudad, después de mucho tiempo y ver a tu familia y tus amigos.

Debe ser complicado combinar los estudios universitarios y tu carrera deportiva; ¿aplicas los conocimientos adquiridos en la universidad a tus entrenamientos?
Complementarlo es difícil pero realmente se consigue con muchas horas de dedicación. Afortunadamente, Medicina es una carrera que se puede sacar estudiando un libro o unos apuntes, si yo le dedico unas horas a una asignatura tengo la capacidad para presentarme al examen, no es como una ingeniería, que si no comprendes los conceptos estás perdido. Lo más complicado es compaginar las prácticas, que sí son obligatorias, con el calendario deportivo, pero la verdad es que los profesores me están dando muchas facilidades para adaptar el horario y lo agradezco mucho.

Respecto a aplicar los conocimientos, creo que sobre todo me hace obtener una visión general bastante interesante de las cosas. En un hospital ves cosas muy duras que recuerdas cuando te va mal en el deporte, lo cual ayuda a replantearte sí realmente merece la pena sentirte mal por una mala prueba o un mal tiempo, por ejemplo. También aplico conceptos concretos de Fisiología, me ayuda a estar siempre alerta con mi cuerpo, pero lo que más valoro es la visión general que te da una carrera como Medicina.

¿Te has sentido apoyada en tu tierra como deportista extremeña?
Es cierto que en los últimos tiempos se están haciendo las cosas bastante mejor y se está apoyando al deporte desde Extremadura y desde Badajoz, en mi caso. Sin embargo, también es verdad que en lo deportivo solemos estar a la cola de todas las regiones y creo que tenemos mucho más potencial del que se piensa. La realidad es que muchos deportistas extremeños estamos fuera, aunque en mi caso la principal razón es poder entrenar con la Selección Española y sacar adelante mis estudios. Las cosas se están haciendo bien, pero se deben hacer mejor.

¿El triatlón tiene el apoyo y la repercusión que merece en el panorama deportivo?
Es cierto que se nota una diferencia entre los deportes mediáticos y los que no lo son tanto. Nosotros no somos un deporte como el fútbol, el baloncesto, el tenis… Somos un deporte minoritario en cuanto a las personas que lo practican, pero por otro lado también es cierto que ahora está muy de moda proponerse a modo de reto acabar un triatlón o conseguir un tiempo determinado. A nivel popular es un deporte en auge pero ese crecimiento no ha llegado a nivel profesional, nosotros no hemos notado cambio alguno.

¿Crees que tiene la misma repercusión el deporte femenino que el masculino?
Aunque es una pena todavía se siguen viendo varias discriminaciones en torno al deporte femenino. Es cierto que en el deporte que yo practico apenas hay desigualdad, los premios son los mismos, las competiciones son las mismas y hay bastante igualdad; esto se debe a que es un deporte joven y a que cuando ha aparecido la mujer ya estaba metida de lleno en el panorama deportivo. Aun así, se sigue notando cierta discriminación, las organizaciones privadas de triatlones siempre establecen nuestra salida unos minutos después que los chicos, algo que dificulta nuestra carrera por tener que estar adelantando chicos, por ejemplo. Creo que nos merecemos una salida propia.

Centrándonos en lo deportivo, 2014 fue un año de oro para ti. ¿Qué se te pasa por la cabeza cuándo cruzas la meta y te das cuenta que has cumplido tus objetivos y sueños propuestos?
Está claro que el pasado 2014 fue un año extraordinario, cumplí todos los objetivos a nivel nacional y di el ansiado salto al panorama internacional absoluto. Cuando cruzas la meta y te das cuenta de que has logrado lo que te has propuesto, lo primero que piensas es: “El trabajo bien hecho”. Alcanzar las metas te permite estar contenta por lo logrado y saber que vas por el camino correcto, si has conseguido esto ¿por qué no lo próximo?

En un deporte como el triatlón el factor físico es muy importante; ¿el mental también lo es?
El estado de ánimo es muy importante e influye fuertemente en el estado físico. El calendario de este deporte está muy apretado y hay que ser mentalmente muy fuerte para soportarlo. Está claro que en todos los viajes puede haber problemas de todo tipo y hay que saber reponerse en todo momento: cancelaciones de vuelos, bicis estropeadas, encontrarte un panorama no esperado… Tienes que tener la mente muy abierta para adaptarte a cualquier situación. Una parte importantísima del triatlón es la capacidad de adaptación, los problemas tienen que quedarse en meras anécdotas para el futuro.

Nos encontramos en la mitad de la temporada; ¿cuáles son tus objetivos este año?
Ahora me encuentro preparando la segunda parte de la temporada. El objetivo es seguir compitiendo en las Series Mundiales, que es el Campeonato del Mundo dividido en 10 pruebas, y además quiero competir en el Campeonato de Europa Absoluto y en el Sub23, que se celebra en España; siendo mi último año en esta categoría me haría mucha ilusión correrlo.

¿‘Río 2016’ es uno de tus objetivos pese a que la clasificación olímpica en el triatlón es muy complicada?
Efectivamente es un objetivo muy complicado, no podía ser de otra forma puesto que estar en unos Juegos Olímpicos es lo máximo. Yo he comenzado a competir en las pruebas clasificatorias este año, entonces voy un poco acelerada porque tengo que adaptarme muy rápido, intentar hacerlo lo mejor posible. Ahora mismo estoy entre las cuatro mejores españolas e irán a Río dos o tres; esto se decide en mayo del año que viene por lo que, según se den las circunstancias, es algo que puede llegar.

Como sabes, la revista Grada trabaja por la integración de colectivos en riesgo de exclusión social. ¿Qué opinión te merece el deporte adaptado? ¿Crees que está integrado?
La verdad es que yo tengo el deporte adaptado muy cerca. En mi deporte hay muchas competiciones que coinciden con las pruebas de paratriatlón y en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid entrenamos con un chico de esta modalidad y creo que su integración personal y deportiva es total. Él entrena con nosotros a diario y se somete a las mismas sesiones de entrenamientos y tiene cosas que se le dan peor, como a cualquiera de nosotros. Creo que el triatlón trabaja muy bien el deporte adaptado, tiene las mismas competiciones y la Federación ha puesto mucho de su parte para sacarlo adelante. La máxima integración posible es tratar el deporte adaptado como lo que es, deporte, y eso, en triatlón al menos, se aplica.
…¿quieres saber más? Suscríbete por 30 euros al año