Foto: Juanjo Marbai
Barullo de febrero
“Niños, no forméis barullo, que está tu padre durmiendo la siesta”. Esa frase resuena en los oídos de muchos que ya peinamos canas, como eco de un pasado en que la hora de la siesta era terreno abonado para el barullo, o sea la diversión, romper normas, dejar salir la fantasía.
Y febrero trae barullo a nuestra tierra. Es tiempo de transgresión, de ruptura de normas, de algarabía de tambores y colores, de alegría y libertad. Disfruten, disfrutemos de una fiesta que cada vez es más grande y atrae a más visitantes.
Y barullo, pero de otro tipo, es el que han formado nuestros mayores, y además con razón. Y es que la creciente digitalización de la sociedad amenaza con vulnerar sus derechos como usuarios. De esto tratamos en nuestra Primera Fila, además de ocuparnos de los niños con discapacidad, sus derechos y su formación.
Y, cuando queramos cambiar el barullo por música, el panorama musical extremeño tiene una buena cartelera de artistas con una interesante trayectoria, como es el caso de ‘Bambikina’, la jaraiceña Esther Méndez, cantante y compositora a la que dedicamos nuestro Perfil.
Y, si quieren disfrutar de algo más que el carnaval extremeño, aprovechen para bucear en nuestras secciones. Seguro que encontrarán lecturas de su interés: música, historia, leyes, periodismo, fotografía, etc. Una amplia oferta donde disfrutar. Salgan, rían, lean, vivan. No dejen nada por vivir.

El festival también incluye un amplio programa de actividades paralelas durante el mes de noviembre, como el programa ‘Cine y escuela’ en el Centro Cultural Alcazaba, con proyecciones para escolares; el taller práctico ‘Diseñar para la cámara’, impartido por el director de arte Damián Galán Álvarez, los días 8 y 9 en la Sala Trajano; un concierto el 16 de la Banda de Música de Mérida en el Centro Cultural Alcazaba; o la exposición de los 20 carteles oficiales del festival del 17 al 30 de noviembre en el mismo espacio.