El Centro Cultural Victoria de la localidad cacereña de Salorino ha acogido la tercera edición del Encuentro de Arquitecturas y Oficios Tradicionales, organizado por la Diputación provincial y enfocado en el patrimonio y las técnicas constructivas de la Sierra de San Pedro.
Esta actividad forma parte del proyecto europeo ‘Feenert’, que promueve la rehabilitación sostenible y la puesta en valor del patrimonio arquitectónico rural en la Euroace, que abarca Extremadura y las regiones Centro y Alentejo de Portugal.
En la inauguración de la jornada, el presidente de la Diputación, Miguel Ángel Morales, acompañado por el alcalde de Salorino, Álvaro Sánchez Cotrina, destacó el compromiso institucional para impulsar el mundo rural y la importancia de valorar las técnicas tradicionales para afrontar retos como el cambio climático. Además, resaltó la colaboración entre instituciones y empresas de ambos lados de La Raya para mejorar la calidad de vida y crear entornos más confortables para la ciudadanía.
En el encuentro participaron expertos en arquitectura, arqueología y restauración, así como investigadores, maestros de obra y vecinos, quienes compartieron conocimientos sobre las técnicas tradicionales y su adaptación al cambio climático y la eficiencia energética. También se realizó una visita a una vivienda tradicional rehabilitada guiada por la artista visual Luca Beijlsmit; a un antiguo horno de tejas; y al mural ‘Con C(Alma)’, obra colectiva liderada por la arquitecta Mara G. Javaloyes, realizada con pintura de cal y pigmentos naturales, que rinde homenaje al oficio de la fabricación de tejas y ladrillos de barro cocido.

El proyecto ‘Feenert’, cofinanciado con fondos Feder y que cuenta con un presupuesto superior a los dos millones de euros, es una iniciativa de cooperación transfronteriza entre España y Portugal para poner en valor edificios históricos del medio rural mediante la calidad constructiva, eficiencia energética y economía circular. Desarrollado desde octubre de 2022 con la participación de diez socios institucionales y académicos de ambos países, su objetivo es consolidar el patrimonio rural como motor de desarrollo económico, cultural y social.
El festival también incluye un amplio programa de actividades paralelas durante el mes de noviembre, como el programa ‘Cine y escuela’ en el Centro Cultural Alcazaba, con proyecciones para escolares; el taller práctico ‘Diseñar para la cámara’, impartido por el director de arte Damián Galán Álvarez, los días 8 y 9 en la Sala Trajano; un concierto el 16 de la Banda de Música de Mérida en el Centro Cultural Alcazaba; o la exposición de los 20 carteles oficiales del festival del 17 al 30 de noviembre en el mismo espacio.