El investigador Francisco Javier González Rico ha recibido una financiación de 10.000 euros en forma de donación por parte de la Asociación Olivera contra el Cáncer, de Oliva de la Frontera, para su investigación sobre el cáncer hepático.
El acto de donación ha tenido lugar en el Rectorado de la Universidad de Extremadura, con la presencia del rector de la Universidad, Pedro Fernández Salguero; la vicepresidenta de la Asociación Olivera contra el Cáncer, Isabel Morujo Hernández; y el investigador postdoctoral Talento AECC Francisco Javier González Rico, del Grupo de Investigación de Biología Molecular del Cáncer.
Francisco Javier González Rico cuenta con una ayuda postdoctoral de la Asociación Española Contra el Cáncer para el estudio de la regeneración celular, con el objetivo de avanzar en nuevas vías de tratamiento para el cáncer de hígado. “Nuestro proyecto de investigación en el grupo de Biología Molecular del Cáncer pretende encontrar marcadores para el pronóstico del hepatocarcinoma, así como posibles dianas terapéuticas para su tratamiento”, explica. “Los recursos aportados por la Asociación Olivera contra el Cáncer los vamos a enfocar en nuestra investigación más directa con pacientes”, subraya.
Por su parte, Isabel Morujo Hernández ha manifestado el honor que supone colaborar con la Universidad en una investigación de estas características. La Asociación Olivera contra el Cáncer surge en Oliva de la Frontera en 2017 a iniciativa de un grupo de mujeres convencidas de que la localidad necesitaba una organización que se involucrase en luchar contra el cáncer. “Desde la asociación queríamos hacer algo diferente, trabajar por y para las personas que sufren cáncer, y hemos optado por la investigación como objetivo principal”, detalla. “Realizamos muchas actividades para recaudar fondos para la investigación y, en este caso, creemos que este el sitio adecuado; esperamos que esta aportación llegue a su objetivo y que en un futuro sigamos colaborando”, añade.
Finalmente, Pedro Fernández Salguero ha destacado la importancia de captar fondos privados en la Universidad que complementen la dotación que se recibe de entidades públicas para la investigación. Igualmente, ha subrayado su agradecimiento a la Asociación Olivera contra el Cáncer por esta donación desde una doble perspectiva: “Como investigador, miembro del equipo de investigadores de Biología Molecular del Cáncer, estamos haciendo un esfuerzo muy importante en trasladar a la clínica y al ámbito sanitario lo que llevamos a cabo en el laboratorio, y esto requiere mucho apoyo, no solo económico sino también de visibilidad del trabajo. Y, en segundo lugar, como responsable de la Universidad de Extremadura, quisiera resaltar la importación de la intención y la vocación de aportar recursos a la investigación por parte de asociaciones y fundaciones, algo que en España es todavía infrecuente”.
Uno de los modelos de estudio en los que trabaja el Grupo de Biología Molecular del Cáncer (Bimocan) se basa en muestras tumorales de pacientes del Hospital Universitario de Badajoz, obtenidas a través del Biobanco del Área de Salud de Badajoz, y de las que el grupo de investigadores ha extraído cuatro marcadores de especial relevancia en la enfermedad. Los investigadores quieren conocer el patrón molecular de estos marcadores en los pacientes y su correlación con el historial clínico, para ofrecer un tratamiento lo más certero posible.
Otro de los modelos de estudio consiste en el cultivo de células tumorales en el laboratorio, lo cual ha permitido probar en ellas un fármaco determinado que ya ha sido utilizado con éxito en quimioterapia para otros tipos de tumores, como el de páncreas. “Los ensayos de este fármaco con cultivos celulares en el laboratorio muestran resultados prometedores, y actualmente estamos pendientes de analizar su correlación con los datos de los historiales clínicos”, concluye Francisco Javier González Rico.
Fuente: Servicio de Difusión de la Cultura Científica de la Universidad de Extremadura