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La historia de resiliencia de Paulo Dias

La historia de resiliencia de Paulo Dias
Foto: Cedida
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Paulo Dias, natural de la localidad portuguesa de Campomayor, sufrió en 2017 una grave hemorragia cerebral que cambió su vida. Graduado en Terapia Ocupacional por la Escuela Superior de Salud de Alcoitão y coordinador de la unidad Delta Saúde del Grupo Nabeiro-Delta Cafés, Paulo comenzó a los 37 años un largo y difícil camino que se ha convertido en un ejemplo de resiliencia, adaptación y voluntad de vivir.

Paulo Dias quiere inspirar y motivar a otras personas que están pasando por momentos difíciles en la vida, y su rehabilitación se ha basado desde el principio en tres conceptos fundamentales: aceptar, trabajar y creer, que fueron cruciales para su recuperación.

Siete años después, la escritora campomaiorense Cláudia Poeiras ha presentado el libro ‘Aceptar, trabajar, creer. Una prueba de resiliencia’ en el Centro de Ciencia del Café de Campomayor.

La historia de resiliencia de Paulo Dias

La obra narra la trayectoria vital de Paulo Dias a partir de su enfermedad, e incluye testimonios de personas que le han acompañado en este nuevo camino, tanto a nivel personal como profesional. La edición de esta publicación ha contado con el patrocinio de Delta Cafés y con el apoyo de la Cámara Municipal de Campomayor, el Centro de Ciencia del Café y el complejo turístico Adaens.


El 7 de abril de 2017 sentiste un fuerte dolor de cabeza y decidiste acostarte. Una decisión que podría tomar cualquier persona que suela padecer migraña. ¿Era habitual para ti tener fuertes dolores de cabeza?
Raramente tenía dolores de cabeza, no era habitual. Como cualquier otra persona había tenido algunas veces un ligero dolor de cabeza, pero nunca algo parecido. Yo era una persona sana, practicaba deporte y no tenía adicción a ninguna sustancia. Aquello fue totalmente inesperado y espontáneo.

¿Cuál ha sido el mayor desafío al que te has enfrentado durante tu proceso de recuperación?
Los mayores desafíos fueron el físico y el psicológico; sentirme atrapado en mi propio cuerpo era ‘vergonzoso’. No tenía control sobre los movimientos de mi cabeza y no podía mover los miembros superiores ni inferiores. También me impactó mucho conocer desde un punto de vista técnico la gravedad de lo que había pasado y el cambio radical que había ocurrido en mi vida. Tener una idea de quién era yo y la persona en la que me había convertido marcó una gran diferencia. Comprender la laboriosa y larga lucha que me esperaba fue otro desafío psicológico que tuve que afrontar.

La historia de resiliencia de Paulo Dias
Rehabilitación de Paulo Dias. Foto: Cedida

Perdiste la memoria durante el proceso de rehabilitación. ¿Qué sentiste?
En el momento en que perdí la memoria tuve un sentimiento de vacío, y angustia por no saber nada de lo sucedido. Por esta razón siempre sentí mucha curiosidad, y hacía muchas preguntas a familiares y amigos. Este sentimiento era muy extraño, pero poco a poco acepté mi nueva realidad. Fue un momento inolvidable cuando me di cuenta que tenía algunos ‘flashbacks’ de recuerdos del Hospital del Mar; fue un momento muy positivo y motivador respecto al estado cognitivo en el que me encontraba. Esa percepción de incapacidad era muy dura.

¿Dónde encontraste la fuerza para seguir adelante durante la recuperación?
Especialmente en mi hijo Guilherme, en mi familia y en mis amigos: fueron el faro para mi recuperación. Otra fuerza que me motivó a seguir luchando fue darme cuenta de que gran parte de la población de Campomayor se unió en torno a mi nueva realidad. La familia Nabeiro también jugó un papel fundamental en este camino, a través de su apoyo y de su presencia desde el primer día de mi enfermedad. Esos fueron los principales apoyos que encontré.

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Foto: Cedida

¿Cómo lograste mantener una actitud positiva y optimista a pesar de los desafíos a los que te enfrentabas?
Mantuve una actitud positiva y optimista porque tuve la suerte de ‘quedarme’ en mi mente, y mi personalidad se reveló como una ventaja durante toda la recuperación. Soy una persona positiva y tranquila por naturaleza, y estas características fueron muy importantes para crear el lema ‘Aceptar, trabajar y creer’. Estas tres palabras, pensadas por mí, encajan muy bien con mi sentimiento y forma de vida actual. El apoyo de la familia, de mis padres y hermanos, también me ayudó mucho a mantener la positividad y el optimismo.

¿Qué papel jugaron tu familia y el equipo médico en tu recuperación?
Mi hijo Guilherme, mi familia y mis amigos fueron el ‘faro’ que me guió en este viaje. Su papel fue y sigue siendo fundamental para que la recuperación sea la mejor posible. Fueron y son el núcleo de mi recuperación. En relación al equipo médico, el sentimiento es de enorme agradecimiento por la atención que me brindó, desde el INEM hasta el Hospital de Santa Luzia de Elvas y el equipo de neurocirugía del Hospital de San José, que me salvó y donde comenzó la fisioterapia. Les estaré eternamente agradecido por su actuación.

La historia de resiliencia de Paulo Dias
Foto: Cedida

¿Qué consejo le darías a otras personas que están pasando por una situación similar a la tuya?
El consejo que puedo dar es que la vida hay que vivirla intensamente, día a día, sin darle importancia a los problemas menores. Poniendo en práctica mi lema ‘Aceptar, trabajar y creer’ se puede ver que es posible, con esfuerzo y dedicación: “Sé lo que tengo que hacer ahora; tengo que seguir respirando, porque ¿Quién sabe qué me deparará la marea mañana? Este es mi consejo

 

 

Paulo Dias, natural da localidade portuguesa de Campo Maior, sofreu em 2017 uma grave hemorragia cerebral que mudou a sua vida. Licenciado em Terapia Ocupacional pela Escola Superior de Saúde de Alcoitão e coordenador da unidade Delta Saúde do Grupo Nabeiro-Delta Cafés, o Paulo começou aos 37 anos um longo e difícil caminho, que se converteu num exemplo de resiliência, adaptação e vontade de viver.

Paulo Dias quer inspirar e motivar outras pessoas que estão a passar por momentos difíceis na vida, e a sua reabilitação baseou-se desde o princípio em três conceitos fundamentais: aceitar, trabalhar e acreditar, que foram cruciais para a sua recuperação.

Sete anos depois, a escritora campomaiorense Cláudia Poeiras apresentou o livro ‘Aceitar, Trabalhar, Acreditar. Uma Prova de Resiliência’ no Centro de Ciência do Café, em Campo Maior.

La historia de resiliencia de Paulo DiasA obra narra a trajetória de vida de Paulo Dias a partir da sua doença, e inclui testemunhos de pessoas que o acompanharam neste novo caminho, tanto a nível pessoal como profissional. A edição desta publicação contou com o patrocínio da Delta Cafés e com o apoio da Câmara Municipal de Campo Maior, do Centro de Ciência do Café e do complexo turístico Adaens.


No dia 7 de abril de 2017, sentiu uma forte dor de cabeça e decidiu ir para a cama. Uma decisão que qualquer pessoa que sofra frequentemente de enxaquecas poderia tomar. Era habitual sentir fortes dores de cabeça?
Raramente, sentia dor de cabeça. Não era habitual. Como qualquer outra pessoa, já tinha sentido algumas vezes, uma ligeira dor de cabeça, mas nunca algo semelhante. Era uma pessoa saudável, praticava desporto e não tinha adições a qualquer substância. Aquela dor foi espontânea!

Qual o maior desafio que teve de ultrapassar durante o processo de recuperação?
O maior desafio foi físico e psicológico, uma vez que sentir-me “preso” no meu próprio corpo era algo constrangedor. Não tinha controlo dos movimentos da cabeça e não tinha movimentos ativos dos membros superiores e inferiores. Também teve muito impacto, ter a noção técnico/terapêutica, da gravidade do que tinha acontecido e da mudança radical que tinha acontecido, na minha vida.
Ter a noção de quem fui e da pessoa que era agora, tinha uma diferença enorme. A perceção da trabalhosa e demorada luta que tinha pela frente, foi outro desafio psicológico que tive de enfrentar.

La historia de resiliencia de Paulo Dias
Reabilitação de Paulo Dias. Foto: Cedida

Perdeu a memória durante o processo de reabilitação. O que sentiu durante esse processo?
Na fase em que perdi a memória, existe em mim um sentimento de vazio e angustia, por não saber nada do que aconteceu. Por esse motivo sempre tive uma enorme curiosidade e fazia muitas perguntas à família e amigos. Era muito estranha essa sensação, mas lentamente fui aceitando a minha nova realidade . Foi um momento inesquecível ,quando percebi, que tinha alguns “flash“ de recordações do Hospital do Mar, foi um momento muito positivo e motivador sobre o estado cognitivo em que me encontrava. É muito duro essa perceção da incapacidade.

Onde encontrou forças para seguir em frente durante a recuperação?
Encontrei forças, principalmente no meu filho Guilherme, na família e amigos. Foram eles o farol da minha recuperação. Outra força que me motivou para continuar a lutar, foi perceber que grande parte da população de Campo Maior se uniu em torno da minha nova realidade. A família Nabeiro, também teve um papel fundamental nesta caminhada, através do seu apoio e presença, desde o primeiro dia, desta infelicidade. Foram estas as principais forças que encontrei.

La historia de resiliencia de Paulo Dias
Foto: Cedida

Como conseguiu manter a atitude positiva e otimista, apesar dos desafios aos que estava a enfrentar?
Mantive uma atitude positiva e otimista porque tive a sorte de “permanecer” na minha mente e de a minha personalidade se revelar, como uma mais valia em toda a recuperação. Sou uma pessoa positiva e tranquila por natureza e essas características, foram muito importantes para a criação do lema: ACEITAR, TRABALHAR e ACREDITAR. Estas três palavras, pensadas por mim, encaixam muito bem no meu sentimento e modo de vida atual. O apoio da família, pais e irmãos, também ajudaram muito a manter o positivismo e o otimismo.

Qual o papel que tiveram os seus familiares e a equipa médica na sua recuperação?
O meu filho Guilherme, a minha família e amigos, foram o “farol“ que me guiou nesta caminhada. O seu papel, foi e continua a ser fundamental para que a recuperação seja a melhor possível. Foram e são o núcleo duro da recuperação.
Em relação à equipa médica o sentimento é de enorme gratidão pelos cuidados que me prestaram, desde o INEM, ao Hospital de Santa Luzia de Elvas e à equipa de neurocirurgia do Hospital de S. José, que me salvou, e onde iniciei a fisioterapia. estarei eternamente grato pelo seu desempenho.

La historia de resiliencia de Paulo Dias
Foto: Cedida

Qual o conselho que daria a outras pessoas que estejam a passar por uma situação semelhante à sua?
O conselho que posso dar é: que a vida é para ser vivida intensamente, dia a dia, sem dar importância a problemas menores. Pôr em prática o meu lema: ACEITAR, TRABALHAR e ACREDITAR, para demonstrar que é possível, com esforço e dedicação: “sei o que tenho de fazer agora. Eu tenho de continuar respirando, porque quem sabe o que a maré me trará amanhã?”. Este é o meu conselho!

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