La Junta de Extremadura ha aprobado el reglamento de la Indicación Geográfica Protegida ‘Cabrito de Extremadura’, culminando el proceso que inició la agrupación ‘Ganaderos Asociación Productores de Cabritos Caprites’ de Mérida ante el Registo de indicaciones geográficas protegidas en 2021.
Esta figura protege la producción y comercialización de cabritos de ambos sexos, nacidos y criados en Extremadura y correspondientes a las razas caprinas, verata, retinta, florida, malagueña, murciano-granadina, blanca andaluza, cabra de las mesetas o serrana, payoya, o los cruces entre dichas razas.
En cuanto al ámbito geográfico de producción y elaboración abarca la totalidad de Extremadura, por lo que los animales deben nacer, criarse, engordarse, sacrificarse y faenarse en la región.
Además, se establecen dos categorías para la comercialización, que se corresponden con las denominaciones ‘Cabrito de Extremadura Lechal’ y ‘Cabrito de Extremadura’, según la edad del animal, su alimentación y el sistema de producción antes del sacrificio.
La indicación geográfica protegida estará gestionada por un consejo regulador, que se encargará de la representación, defensa, garantía, formación, investigación, innovación, desarrollo de mercados y promoción de la indicación; también deberá velar por su prestigio y fomento, y tendrá atribuciones para denunciar cualquier uso incorrecto de la misma.
Para los responsables de la Consejería de Agricultura el hecho de disponer en el mercado de un producto con una marca acreditada a nivel mundial ayudará a que aumente tanto su demanda como su valor: “Cabrito de Extremadura es seña de identidad gastronómica de la región, y es responsabilidad de la Junta de Extremadura y la Indicación Geográfica Protegida ‘Cabrito de Extremadura’ poner en valor una carne de calidad excepcional, producida en la dehesa, y de un modo natural”.
“Además, las indicaciones geográficas protegidas, junto con las denominaciones de origen protegidas, potencian la vertebración del territorio, siendo incluso el punto de unión entre el agricultor o la agricultora, la industria y el turismo. Estas sinergias ayudan a potenciar la diversidad y el arraigo cultural con el patrimonio del territorio, transformando las zonas rurales”, se añade en este sentido.
También se destaca la constante labor que desempeñan para impulsar y facilitar el relevo generacional, enseñando a la población de sus territorios, desde los propios colegios hasta las escuelas de formación profesional, dando a conocer la importancia de sus productos autóctonos y las indicaciones geográficas protegidas y las denominaciones de origen protegidas que los protegen y garantizan.
La Dirección General de Agricultura y Ganadería de la Junta de Extremadura ha acordado la concesión de la Indicación Geográfica Protegida Cabrito de Extremadura, la cual cesará cuando la Comisión Europea adopte una decisión sobre su inscripción en el registro comunitario correspondiente.