La Junta de Extremadura ha declarado Bien de Interés Cultural ‘La montería y la rehala en Extremadura’, con la categoría de Patrimonio Cultural Inmaterial, según recoge el Diario Oficial de Extremadura.

Se trata de una modalidad de caza mayor, con más de 700 años de historia, que otorga especial protagonismo a los perros de caza. Consiste en abatir a grandes piezas como jabalíes o ciervos, aunque dependiendo de la zona en la que se realice la montería también se pueden cazar con jauría otras especies, como el gamo o el muflón.

Los canes siguen el rastro del animal hasta ubicarlo; una vez consiguen detectar la zona en la que descansa, los animales ladran hasta que la pieza huye. Los perros tratarán de llevar a la presa hasta la zona en la que se encuentran postrados los cazadores, que trataran de abatir al animal.

Esta declaración tiene su fundamento en la Ley 2/1999, de Patrimonio Histórico y Cultural de Extremadura, que indica que constituyen el Patrimonio Histórico y Cultural de la región todos los bienes tanto materiales como intangibles que, por poseer un interés artístico, histórico, arquitectónico, arqueológico, paleontológico, etnológico, científico, técnico, documental y bibliográfico, sean merecedores de una protección y una defensa especiales.

También señala que las artes y tradiciones populares, los usos y costumbres de transmisión consuetudinaria en canciones, música, tradición oral, las peculiaridades lingüísticas y las manifestaciones de espontaneidad social extremeña, podrán ser declarados y registrados con las nuevas técnicas audiovisuales, para que sean transmitidos en toda su pureza y riqueza visual y auditiva a generaciones futuras.

El presidente de la Federación Extremeña de Caza, José María Gallardo, ha mostrado su satisfacción por esta declaración: “es un día muy importante para el sector cinegético en Extremadura y para la sociedad rural de la región”.

“La montería y la rehala es uno de los bienes culturales más importantes que tenemos en Extremadura, y es un honor que se la reconozca y la proteja como una expresión de nuestro patrimonio. Tras mucho trabajo por parte del sector y de la Junta de Extremadura, por fin se reconoce la relevancia de la montería para nuestra región, garantizándose de esta manera su protección y conservación”, ha añadido.

La montería y la rehala tienen relevancia en España desde que, en el siglo XIV, Alfonso XI escribiera el ‘Libro de la Montería’. Esta obra se divide en tres volúmenes que contienen 39 grabados en los que se describen minuciosamente los bosques y montes de la España contemporánea, así como toda la fauna que fuera idónea para la caza o montería, actividad predilecta de la nobleza.