Logo revista Grada
Buscar

Memoria viva de Almoharín, capital europea del higo

Memoria viva de Almoharín, capital europea del higo
Foto: Cedida
Léeme en 5 minutos

El interés natural del término de Almoharín (Cáceres) en cuanto a vegetación y fauna es notable: encinas, alcornoques, jaras, romero, retama, espárragos trigueros, criadillas de la tierra y, entre los animales, conejo, liebre, zorro y jabalí. El clima es de tipo mediterráneo subtropical, destacado por la irregularidad térmica y pluviométrica.

El cultivo más característico del pueblo es la higuera, proporcionando una agricultura productiva y exclusiva, como son los bombones de higo, que se está comercializando, y que ha logrado un amplio mercado en los últimos años. En 2017 se celebró la I Feria Agroalimentaria del Higo, cuando Almoharín recibió el galardón de “Capital Europea del Higo”.

Sobre este pueblo cercano a Cáceres, su medio natural, la tradición oral, la cultura material y tecnología industrial, las tradiciones populares y la arquitectura autóctona, versa el último libro de José Antonio Ramos Rubio, doctor en Historia del Arte, cronista oficial de Trujillo y académico correspondiente de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes y de la Historia, prologado por su alcaldesa, Antonia Molina Márquez, quien destaca de la obra que “pretende acercar nuestro pasado cultural presente, a través de la memoria viva almohariense”. 

El autor destaca la producción ganadera de la localidad; la cabaña pecuaria, integrada por el ganado ovino, vacuno y caprino y cómo el sector ovino representa una gran parte de la actividad económica de la zona. El Plan Badajoz contribuyó a desarrollar esta zona agraria, aumentando su producción con la transformación del secano en regadío en 1.700 hectáreas, que evitó la emigración continuada.

Almoharín continúa celebrando fiestas tradicionales en las que se utilizan instrumentos en los bailes, danzas y canciones, como el pandero e instrumentos de cuerda (rabel, guitara, bandurria y violín), viento (flauta de pico y chirimía) y otros de percusión como el tamboril, zambomba, pandereta, triángulo, castañuelas, tablillas y cualquier utensilio casero que sirva para hacer ritmo. La tradición oral de la localidad fue recogida por Angelita Capdevielle (1890-1972), quien incluyó en su capítulo XI, ‘Tierra de los jamones: Montánchez y su comarca’, los siguientes títulos: ‘Romance de Nochebuena’ y ‘Al subir a la enramada’. En este apartado hay que destacar la loable labor llevada a cabo por el grupo de coros y danzas ‘Sopetrán’, desde su creación en el año 1997, que ha realizado un trabajo de investigación sobre el folclore de la comarca, fundando la escuela infantil del grupo, y que ya cuenta con un disco: ‘Almojarín’. Antonio Gómez Yebra, profesor de Filología Hispánica en Málaga, natural de la localidad, ha divulgado la literatura infantil en obras como ‘Travesuras poéticas’ (1979), ‘Versos como niños’ (1983) o ‘Menuda poesía’ (1994).

La fábrica constructiva más importante de Almoharín es su iglesia parroquial, bajo la advocación del Salvador, de finales del XV. Respecto a la gastronomía, además de los higos, podemos citar cultivos nuevos como el cacahuete para fabricar turrón, los dulces típicos, los sabrosos derivados del cerdo y productos silvestres de la tierra. En el campo de la artesanía, han dejado su impronta todas las culturas que han pasado por nuestra región, desde las fraguas de la época prerromana a las distintas formas de trabajar el barro por los romanos, pasando por la influencia árabe.  La existencia de la artesanía del telar ya existía en el siglo XIX; pero si un artista de Almoharín ha traspasado fronteras es, sin duda, Miguel Sansón, uno de los artistas de la forja más reconocidos actualmente gracias a su inquietud por innovar y su capacidad para comercializar su obra.

Las fiestas litúrgicas se aglutinan en el culto a san Antonio y la veneración a Nuestra Señora de Sopetrán, patrona de la localidad, que se celebra el lunes de Pascua. La población ha sedimentado a lo largo de su historia unas tradiciones populares y festivas, así como otras ferias que se han incorporado a su calendario. Navidad, el Carnaval, la Semana Santa; San Antonio, el primer domingo de mayo; la Feria Ganadera, el 13 y el 15 de mayo; la fiesta de ‘La Maza’, el 13 de junio; la Fiesta en honor de los Mayores, a mediados de agosto, y la Feria Agroalimentaria del Higo en septiembre.

La arquitectura tradicional o vernácula constituye una de las expresiones culturales más significativas de cada estructura socioeconómica y la roca omnipresente para la construcción de las casas, las tumbas, puentes, las estelas y la arquitectura vernácula presente en la comarca de Sierra de Montánchez y Tamuja es el granito. La tipología edificatoria es la vivienda unifamiliar adosada, desarrollada en una o dos plantas con muros de mampostería, enfoscados con mortero de cal. Los ejemplos de arquitectura vernácula son el fruto de un lento proceso que ha durado centenares o miles de años, utilizando del mejor modo los recursos locales. En la mayoría de los chozos o bujíos se ha usado la técnica de la piedra seca, en la que no se empleaba cemento o mortero. En varios lugares del territorio, el bohío ha mantenido su uso durante cientos de años. Por otro lado, son varias las zahúrdas localizadas en el término municipal, una construcción para mantener ganado porcino.

El libro concluye con un capítulo titulado ‘Disertaciones de Almoharín’, en la que oriundos del pueblo ofrecen su visión sobre la realidad pasada, presente y futura del mismo: ‘Almoharín, una comunidad en un mundo en cambio’, de Germán Jaraíz Arroyo, profesor titular de Políticas Sociales en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla; ‘Las ciringoncias del fraile’, por José Fernández Salas, arquitecto y profesor honorario de las universidades de La Coruña y Santiago de Compostela; ‘Almoharín, historia y memoria del siglo XX’, por Victorino Mayoral Cortés, exconsejero de la Junta de Extremadura y exdiputado al Congreso por Cáceres; y ‘Cadenas, pegamento y humanidad. Una reflexión sobre la tradición oral’, de Juan Lanzas Amador, de la Universidad de Extremadura.

ENTRADAS RELACIONADAS

Las llamadas al respeto y a la igualdad son continuas en todos los estadios. ‘Respect’ (en castellano, respeto), la canción...
El exfutbolista Juan Carlos Unzué, enfermo de ELA (esclerosis lateral amiotrófica) no se lo creía. La ELA es una enfermedad...
No resulta baladí un simple cambio de palabras en la Constitución. Las palabras nacen a veces del pueblo o son...
La Comisión Europea adoptó el pasado mes de septiembre una propuesta legislativa que aspira a facilitar el derecho europeo a...
“Es la sociedad la que decide cómo evoluciona su lengua y no las instituciones. Son los hablantes quienes deciden cómo...
Ciudades y pueblos de la región se unieron el mes pasado en la Marcha Rosa, que llenaba a mediados de...

LO MÁS LEÍDO