La provincia de Cádiz, aun teniendo unas dimensiones pequeñas comparándola con otras, guarda numerosos y variados tesoros turísticos con los que sorprender al visitante. Es, sin duda alguna, mucho más que sol y playa.
Un ejemplo claro de ello es Olvera, una localidad serrana de poco más de 8.000 habitantes, que ha sido declarada por la plataforma digital EscapadaRural.com ‘La capital del Turismo Rural de 2021’.
Ubicada en la serranía gaditana, en tierras antaño fronterizas y deseadas por cristianos y musulmanes, es ahora una coqueta localidad, de reluciente y encalado blanco, donde sobresale un promontorio rocoso que sirve de base a su imponente castillo y a la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación. Visibles casi desde cualquier parte de Olvera, son los dos edificios más representativos del municipio.
Calles estrechas, serpenteantes y empinadas, en otras épocas perfectas para ser defendidas, nos dan una idea precisa de sus orígenes.
Subir a lo alto de castillo para disfrutar el paisaje que nos circunda es todo un privilegio para el viajero y, en especial, para los amantes de la fotografía.
Recientemente se ha celebrado la gala de entrega de tan importante galardón. El acto contó, junto con la máxima autoridad local, con la presencia de representantes municipales de otros pueblos de España que participaron en este certamen. Todo un reconocimiento en favor de ese turismo interior ‘de pueblo’ que tanta riqueza y empleo, además de asentar población, crea. Una magnífica iniciativa que trata de valorizar lo rural.
Desde estos párrafos no queda más que, además de felicitar al pueblo de Olvera, recomendarle al lector una visita tranquila a este pequeño paraíso interior del sur de España.
Patear sosegadamente sus calles, empaparse de su historia, disfrutar de su gastronomía y del marco natural incomparable donde se asienta (por ejemplo, con un paseo en bicicleta por la cercana Vía Verde de la Sierra, que tiene su base en una antigua infraestructura ferroviaria nunca utilizada) son consejos que no deben caer en saco roto.
Así pues, no olviden el nombre de este pueblo y anótenlo para sus próximas escapadas. Les están esperando con los brazos abiertos, se lo digo por experiencia propia.