El gerente del Servicio Extremeño de Salud (SES), Ceciliano Franco, y la presidenta de la Asociación para la Donación de Médula Ósea de Extremadura (ADMO), Virtudes Carrasco, han firmado un convenio de colaboración para la atención de donantes y pacientes oncohematológicos y sus familiares.
ADMO es una entidad sin ánimo de lucro que proporciona herramientas dirigidas a favorecer la adaptación al proceso de enfermedad y tratamiento a pacientes oncohematológicos y a sus familiares, por lo que el SES orientará sobre estos servicios y recursos a los pacientes y familiares que acuden a sus hospitales.
“Este convenio consolida actividades que ya veníamos haciendo. Nos da la posibilidad de informar a los familiares y al personal sanitario y, sobre todo, de acompañar a los pacientes ante el diagnóstico de la enfermedad oncohematológica“, señala Virtudes Carrasco.
El convenio va a promover un acompañamiento más integral a la persona con enfermedad oncohematológica y a sus familiares, siempre y cuando las personas lo requieran de forma libre y voluntaria, y no exista impedimento para ello. “No queremos que ningún paciente se sienta solo, queremos ofrecer a los centros sanitarios los recursos con los que contamos como entidad, ayudando con nuestros servicios y el voluntariado”, añade.
Según se establece en el convenio, el SES designará un representante que actuará como interlocutor entre el personal de los centros sanitarios y el personal de ADMO. Por su parte, la entidad elegirá a una persona como coordinadora del voluntariado, que responderá de la actuación de sus miembros y será quien represente a ADMO en la interlocución con el SES. “Ahora nuestros voluntarios pueden acceder fácilmente a los centros sanitarios para acompañar a los pacientes y tener una relación directa con ellos, sirviendo de apoyo psicológico para sus familiares”, explica Virtudes Carrasco.
Asimismo, se realizarán actividades de animación y entretenimiento lúdico y educativo para facilitar la estancia de la persona enferma en el centro sanitario.
Ambas partes se obligan a prestar al personal voluntario la información, formación, orientación y apoyo necesarios para el ejercicio de las funciones que se les asignen y rechazar cualquier contraprestación material que pudiera serle ofrecida por parte de los beneficiarios o de cualquier otra persona relacionada con ellos, como remuneración de sus actividades voluntarias.
En cuanto a los nuevos proyectos de ADMO, Virtudes Carrasco recuerda que la entidad sigue celebrando sus 25 años de existencia: “vamos a presentar una revista a finales de este mes, y también tenemos pendiente el Congreso Nacional de Hematología y un festival de música que se anunciará pronto”. Con estas actividades la asociación tiene como fin ayudar a estos pacientes, a la vez que informa y acompaña a las personas que deciden hacerse donantes de progenitores hematopoyéticos.