La décimo quinta edición de la Noche en blanco ha congregado en las calles del centro de Badajoz a más de 100.000 personas para disfrutar de una amplísima variedad de propuestas artísticas, edificios singulares abiertos al público y actividades para toda la familia.
Un concierto de música clásica bajo la luz de las velas ‘Candlelight’ de Homage abrió la programación en la Alcazaba, tras la cual se han desarrollado más de 160 actividades en diferentes espacios públicos y culturales de la ciudad, como la Plaza de San José, con el espacio ‘Confluencias’, en el que han participado diferentes artistas.
En la Plaza de España ha tenido lugar el pasacalles ‘Anillo de luz’, con una gran esfera móvil y coreografías aéreas luminosas. En este espacio también se ha instalado el photocall y videocall ‘La Nube Kinto’, que ha permitido ‘sobrevolar’ la ciudad y sus lugares más emblemáticos y descargarse la foto o vídeo. Y en los Jardines de la Galera se ha celebrado ‘Visual Retro’, un espacio musical con diferentes artistas y efectos visuales con proyecciones digitales con material analógico.
La Concejalía de Cultura ha acogido el espectáculo ‘El árbol del agua’, una original propuesta de danza acrobática y acuática. En la Plaza de Santa María, ‘El reino perdido de los unicornios’ ha hecho las delicias de los más pequeños con su espectáculo de danza, acrobacias, luz y fantasía, que ha acompañado a la programación del Museo de la Ciudad Luis de Morales y la exposición ‘Fantasías del Prado’ de Alberto García-Alix en el Espacio Cultural Santa Catalina, además de diferentes espectáculos, como la interpretación de la banda sonora original de ‘El señor de los anillos’ a cargo de Busker String Quartet.
En la Plaza López de Ayala la escuela de danza María Montero de Espinosa ha ofrecido una muestra de su trabajo en el ‘Ballet bajo las estrellas’, y el entorno de la Alcazaba ha acogido recreaciones históricas, visitas guiadas y monumentos abiertos con la nueva iluminación nocturna.
También se han podido visitar museos, centros artísticos y salas de exposiciones, mientras que diversas actuaciones musicales de todo tipo han resonado durante toda la noche en la Plaza Alta, la Plaza de la Soledad, San Atón, el claustro de San Agustín o la Plaza de Cervantes, así como en la terraza del Teatro López de Ayala.