La Diputación de Cáceres puso en marcha en 2022 el Encuentro de oportunidades en el mundo rural ‘Jato’, con el objetivo de mostrar las oportunidades que atesora el medio rural de la provincia de Cáceres y las posibilidades de empleo y calidad de vida que ofrece a su población, basados en el bienestar y la sostenibilidad social, económica y medioambiental.
Su nombre hace referencia a un término castúo con el que se denomina una bolsa de tela que se prepara con ropa y comida para irse unos días de casa, muy utilizado en la jerga popular del entorno rural cacereño.
Se trata de un evento que se ha celebrado del 24 al 26 de marzo para dar a conocer todo el capital humano de la provincia, su talento, creatividad, energía, vitalidad, su riqueza, tradición, capacidad de innovación, y alternativas de presente, de progreso y de futuro.
En este certamen el medio rural cacereño se muestra como un territorio alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en busca de un equilibrio desde el punto de vista económico, sociocultural y medioambiental.
Cáceres se convierte en un escenario para presentar proyectos competitivos, capaces de generar empleos estables y de calidad, y para dar a conocer un modelo rural en el que tradición, protección ambiental, salud, bienestar, formación, modernidad, competitividad empresarial, calidad en las infraestructuras y adaptación a los cambios y necesidades personales y profesionales van muy estrechamente ligados.
En Jato se promociona e impulsa la creatividad de los emprendedores que surgen y se asientan en el territorio cacereño, y se dan a conocer empresas innovadoras que han decidido instalarse en municipios rurales de la provincia para abrir su mercado a nivel regional, nacional e internacional.
Jato es también un punto de encuentro entre entidades y profesionales implicados en la mejora de la empleabilidad y las personas desempleadas, egresados y estudiantes de Formación Profesional que quieran desarrollarse laboralmente en el entorno rural cacereño. Un foro para compartir buenas prácticas, retener talento y transferir conocimiento, con el fin de mejorar la inserción laboral y descubrir un mercado de posibilidades para quienes deciden quedarse a vivir en los pueblos de la provincia de Cáceres.
Precisamente, las oportunidades de emprendimiento, como columna vertebral de Jato, han protagonizado las jornadas que se han celebrado en el Foro de Los Balbos, con ponencias y encuentros sobre retos del desarrollo rural, casos de éxito o renovación generacional. También se han mostrado recursos para fomentar la empleabilidad y talleres, se ha celebrado un ‘scape room’ sobre emprendimiento, y el Museo Helga de Alvear ha acogido un concurso de defensa y presentación de proyectos empresariales. Además, en la Plaza de Santa María se ha celebrado el II Foro Conecta-Empleo para impulsar el emprendimiento y la empleabilidad.
Además, Jato es un espacio de reflexión sobre la nueva realidad y necesidades cambiantes que vive el medio rural y las soluciones aportadas por proyectos innovadores para afrontar el reto demográfico de los entornos más afectados por la despoblación. También es una plataforma para fomentar la conectividad y nexos de cooperación entre entidades públicas y empresas, para aportar soluciones que mejoren la habitabilidad y la calidad de vida de la población rural, así como la experiencia de quienes visitan la provincia de Cáceres.
Por último, Jato ha vuelto a dar visibilidad a la cultura de la provincia de Cáceres y ha mostrado su oferta turística y las posibilidades de ocio que brinda como destino turístico de interior. Para ello ha albergado talleres de artesanía con demostraciones de los productos más emblemáticos de la provincia, y ha acogido un mercado de productos artesanos, como joyería en vidrio, cerámica, torneados en madera, vidrieras, artículos de marroquinería, piel o artesanía textil, y específicamente productos de Torrejoncillo, como área de interés artesanal, que se caracteriza por su alfarería, orfebrería, bordados, calzados, artículos de cuero o guarniciones para las caballerías, entre otros.
La música también ha sido protagonista, con conciertos en la Plaza de San Jorge de Acetre, Les motriz, Dani Serra DJ, The survival league, Los niños de los ojos rojos y Ghettodisko DJ.
A esto se han unido los pasacalles llegados de los distintos municipios y un desfile que ha mostrado las fiestas más representativas de la provincia, en el que han participado más de 600 personas.
Tras solo dos ediciones ‘Jato’ se ha convertido ya en una cita anual ineludible para seguir creciendo como provincia y fomentar la habitabilidad y equilibrio poblacional en el entorno rural cacereño.