Emerita Neuro es un centro privado de neurorehabilitación infantil y de adultos ubicado en Mérida, con un enfoque multidisciplinar en trastornos neurológicos y del desarrollo. Así, realiza un abordaje integral de la rehabilitación neurológica, combinando terapia física, cognitiva y del lenguaje.
Entre sus servicios se encuentra la fisioterapia, logopedia, terapia ocupacional, neuropsicología, psicología general sanitaria, nutrición o neuromodulación, además de actividades de formación. Una de sus líneas más destacadas es la neuropediatría, con consulta específica para menores con trastornos del desarrollo, del aprendizaje o problemas neurológicos.
El conjunto de sus servicios se orienta tanto a tratar daños neurológicos adquiridos (ictus, traumatismo craneoencefálico, etc.) como trastornos del neurodesarrollo y otras patologías del sistema nervioso.
En este contexto, una de sus colaboraciones se desarrolla con Fundación Primera Fila a través del programa Theracenter Extremadura, concebido para atender a personas con lesiones cerebrales y trastornos neurológicos mediante programas intensivos y personalizados.
Theracenter y Emerita Neuro comparten el interés en la rehabilitación neurológica y en la atención a personas con daño cerebral y trastornos neurológicos, y su colaboración contribuye a crear itinerarios de atención más coherentes para las familias.
Conocemos mejor sus servicios hablando con el director técnico de la clínica, Armando Rodríguez.

¿Cómo definiría la misión de Emerita Neuro en el contexto de la neurorrehabilitación en Mérida y en Extremadura?
Nacimos hace 15 años ya con un motivo claro, crear un centro de referencia de neurorrehabilitación en la región, porque Extremadura en esos años no contaba con un centro especializado y los pacientes tenían que ir a Sevilla, Madrid, Barcelona… para ser tratados, con todo lo que conllevaba a las familias.
Yo mismo, como profesional sanitario trabajando en centros de referencia nacionales en neurorrehabilitación, tenía en muchas ocasiones pacientes extremeños que me animaban a montar algo en la región. Así que, después de unos años de aprendizaje nació EmeritaNeuro, que fue el primer centro especializado de neurorrehabilitación en Extremadura.
Aunque afortunadamente Extremadura ya cuenta con algún centro más para el tratamiento de neurorrehabilitación, nuestra misión sigue centrada en acercar los medios más avanzados y el trabajo, con la mayor evidencia científica, a los usuarios que requieran un tratamiento de rehabilitación neurológica en cualquiera de sus especificaciones o su edad.
¿Qué aspectos diferencian a EmeritaNeuro de otros centros de rehabilitación neurológica de la región?
Nosotros nos definimos por la máxima especialización. Es la piedra angular de nuestra empresa, un equipo de profesionales altamente cualificado y con experiencia. Es imprescindible tener formación en Neurología para abordar un tratamiento en esta área. Desde ese punto de partida, EmeritaNeuro se preocupa siempre de contar con las mejores instalaciones; de hecho, ahora estamos en proceso de ampliación del centro y contaremos próximamente con unas instalaciones de más de 750 metros cuadrados, con áreas muy especializadas y diferenciadas (fisioterapia neurológica, fisioterapia respiratoria y cardiaca, neuromodulación, unidad del dolor, logopedia, terapia ocupacional, integración sensorial, psicología general sanitaria, neuropsicología y consultas médicas). Contamos también con equipos tecnológicos de realidad virtual, de neuromodulación cerebral y periférica, estimulación de la deglución, estimulación cognitiva y esperamos incluir en breve equipos de electroencefalografía en valoración y tratamiento de neurofeedback y robótica.
¿Cuáles son las áreas terapéuticas y los servicios que ofrecen actualmente?
Contamos con un equipo de 17 profesionales dedicados a la población tanto pediátrica como adulta con servicios de consulta de Neuropediatría, consulta de Nutrición, Fisioterapia Neurológica Pediátrica y Adulta, Neuropiscología Infantil y Adulta, Neurolopogedía Infantil y Adulta, Neuroterapia ocupacional Infantil y Adulta, Integración Sensorial y Psicología General Sanitaria e Infanto-juvenil.
Ofrecemos servicios específicos, desde el abordaje en atención temprana con un enfoque neurológico del desarrollo hasta el abordaje de daños cerebrales sobrevenidos, traumatismos cráneo-encefálicos, lesiones medulares, patologías neurodegenerativas, patologías respiratorias y cardíacas.
Actualmente unidos a los programas de Neuromodulación ofrecemos programas específicos en patologías concretas, sobre todo depresión, ansiedad, long-Covid, esclerosis múltiple, ELA, Parkinson o Ataxias. Y en los próximos meses, aunque ya estamos tratando algunos perfiles así, abriremos una unidad del dolor especializada basada en un enfoque neurorrehabilitador.

¿Qué perfiles de pacientes atienden con mayor frecuencia, tanto en población infantil como adulta?
En los niños es común encontrar sobre todo trastornos del neurodesarrollo, actualmente muchos de carácter genético, ya que la incidencia de trastornos de este tipo está siendo muy acentuada en la última década, por encima de niños con parálisis cerebral o síndromes más conocidos; pero en pediatría abordamos todos los casos que realmente tengan una afectación central o periférica del sistema nervioso.
En el caso de los adultos la mayor demanda siempre son los casos de ictus, pero cada vez contamos con más incidencia de pacientes con enfermedades neurodegenerativas como Parkinson, esclerosis múltiple, ELA, distrofias musculares y demencias o Alzheimer. De hecho, para estos casos, contamos con un apartamento interno con cocina y cuarto de baño adaptado (‘El hogar de Carmen’) para el entrenamiento de las actividades básicas e instrumentales de la vida diaria, para focalizar no solo un trabajo de neurorrehabilitación con el que mejoremos el reclutamiento musculo-esquelético, capacidad cognitiva o de la comunicación de la persona, sino sobre todo su funcionalidad.
¿Cómo describiría la colaboración con Fundación Primera Fila y el proyecto Theracenter Extremadura?
Imprescindible y fundamental. Sin duda, tener en Extremadura una Fundación que dé visibilidad y apueste por el progreso y la evolución de las terapias, los centros y los sistemas de protección, reclamación e inclusión de las personas con discapacidad es una labor elemental. Gracias a Fundación Primera Fila y a Theracenter Extremadura muchas personas de nuestra región tiene acceso a ser tratados, como el caso del proyecto que compartimos, en centros de referencia y especializados en Extremadura.
¿Qué beneficios aporta esta colaboración para sus pacientes y para el centro?
Enumerarlos sería interminable. Es sin duda, para mí, el mayor programa de colaboración que EmeritaNeuro puede ofrecer. Es muy duro tener una afectación neurológica; todo aquella persona que lo padezca en primera persona o sea familiar directo conoce perfectamente lo difícil del acceso a las terapias, lo costoso que es mantener equipos técnicos de adaptación, terapias, alimentación… Por eso, poder contar con un convenio gracias al cual personas con necesidad de tratamiento específico, pero sin recursos económicos, puedan recibir tratamiento, es una labor encomiable.
En base a criterios económicos, de necesidad y del entorno de la persona, decidimos si se puede cubrir parcial o íntegramente el tratamiento, gracias a la ayuda económica de Theracenter Extremadura. Estudiamos los casos y, en algunas ocasiones, EmeritaNeuro pone también su granito de arena económico para que, en pacientes de este tipo, con unas necesidades específicas y sin recursos económicos significativos, se reduzcan los costes del servicio y nunca queden sin acceso a una línea terapéutica.

¿Cuáles son sus principales retos y objetivos a medio plazo en términos de desarrollo del centro y de sus servicios?
EmeritaNeuro sigue en continuo crecimiento. Hace unos años iniciamos nuestra andadura en el ámbito académico colaborando con proyectos autonómicos, como la formación en los cursos de ELA para la próxima residencia que abrirá sus puertas en Cáceres en 2027; en cursos de la Escuela de Ciencias de la Salud, donde formamos en neurorrehabilitación pediátrica e ictus; en colaboraciones para jornadas científicas nacionales y autonómicas sobre patologías centrales; y en formaciones privadas a profesionales interesados en este campo.
También hace unos años dimos nuestros primeros pasos en proyectos de I+D+i; de hecho, contamos con la publicación de un estudio piloto en esclerosis múltiple, y próximamente iniciaremos ensayos clínicos para el abordaje de la espasticidad en programas de doctorado junto a la Universidad de Extremadura; por otro lado, con orgullo podemos contar que este es el tercer año de un proyecto que esperemos podamos extender en un futuro, basado en la prevención secundaria en centros de educación infantil, valorando niños y niñas de 6 meses a 3 años, analizando posibles signos de trastornos del desarrollo infantil, para un diagnóstico temprano y posibles líneas de intervención, y en el que ya han sido valorados más de 150 niños.
Para 2026 contamos con un proyecto de ampliación muy ambicioso, pasando del actual centro, de 330 metros cuadrados, a unas instalaciones cercanas a los 750 metros cuadrados de centro integral de neurorrehabilitación. Estamos muy ilusionados y con ganas de abrir las nuevas unidades independientes de tratamiento en fisioterapia respiratoria y cardiaca, donde podremos dar servicio a niños y adultos con disfunción en estas áreas a quienes los servicios públicos prácticamente no dan respuesta específica, y la apertura de una unidad para el abordaje del dolor crónico y neuropático con enfoque de neurorrehabilitación.
Además, con esta ampliación de la oferta médica, queremos incluir otros especialistas que completen nuestro cuadro médico, como neumólogos, cardiólogos, neurofisiólogos y expertos en neurología adulta.
¿Qué innovaciones o nuevas tecnologías piensan implementar para mejorar la atención en neurorrehabilitación?
La idea es incluir el apartado de Neurofisiología para estudios más clínicos, Electromiografia de superficie, Electroencefalografía Cuantitativa (qEEG o Mapeo Cerebral) y el uso de Neurofeedback. También queremos aumentar los servicios de Neuromodulación de la unidad de dolor con tecnología específica, y estamos estudiando la posibilidad de contar con Robótica pediátrica, para lo que ya hemos tenido algunas reuniones con Marsi Bionics.
¿Qué posibilidades hay de fortalecer vínculos con entidades sociales como Fundación Primera Fila en el futuro?
Extremadura tiene una población con muchas necesidades en este campo, con pocos servicios y lamentablemente muchas veces sin los recursos económicos necesarios. Esto hace imprescindible por nuestra parte la colaboración con fundaciones, asociaciones e incluso empresas que ayuden a que estos proyectos se puedan llevar a cabo y que ninguna persona con estas necesidades se queden sin la intervención mínima necesaria para su tratamiento.
