En ocasiones creemos que ser un buen ser humano es ayudar a todo el mundo que nos los pida. Pero nos olvidamos de un detalle, dado que hay que valorar si nos pide ayuda. A veces, no lo contemplamos y nos trae mucho sufrimiento porque la otra persona no quiere ser ayudada.
Ayudar sin filtro ni control nos puede hacer enfermar, porque nos sentimos culpables por no hacer más por quién se porta mal con nosotros o nosotras. Sin embargo, debemos darnos amor propio y dignidad, teniendo en cuenta las leyes de la ayuda, para no salir mal parados y con angustia por la situación que nos estresa. Muchas personas a las que queremos ayudar se aprovechan de nuestra bondad y voluntad volviéndose egoístas, caprichosas, insensibles y con llamadas de atención hacia nosotros y nosotras. Por tanto, este círculo vicioso debe acabar de manera drástica, para conseguir la paz y armonía deseada.
En primer lugar, debes saber que la ayuda es bidireccional (dar y recibir), no puede ser unidireccional. Y si es unidireccional, lo que das es como un regalo, sin esperar nada a cambio, pero a alguien que se haya portado bien contigo o que sepas que no te hace mal.
En segundo lugar, debes saber que no eres el salvador o la salvadora que tiene que sanar, salvar o resolver los problemas de todo el mundo.
En tercer lugar, deja de tener ese espíritu de sacrificio de que todas las batallas las tienes que resolver. Las injusticias que quieras resolver serán las que te ayuden a ti a encontrar el equilibrio y la armonía; es decir, si eres una persona conciliadora y mediadora y te equilibra debes hacerlo, puesto que ayudando a los demás en ocasiones te ayudas a ti mismo o a ti misma.
En definitiva, no olvides que en primer lugar estás tú, dándote tu dignidad y tu respeto. Por tanto, elige dónde inviertes tu tiempo, esfuerzo y energía.

El festival también incluye un amplio programa de actividades paralelas durante el mes de noviembre, como el programa ‘Cine y escuela’ en el Centro Cultural Alcazaba, con proyecciones para escolares; el taller práctico ‘Diseñar para la cámara’, impartido por el director de arte Damián Galán Álvarez, los días 8 y 9 en la Sala Trajano; un concierto el 16 de la Banda de Música de Mérida en el Centro Cultural Alcazaba; o la exposición de los 20 carteles oficiales del festival del 17 al 30 de noviembre en el mismo espacio.