La Asociación extremeña de padres para la integración, el bienestar y la autonomía (Aexpainba) ha conmemorado su vigésimo quinto aniversario en Badajoz con la celebración de una convivencia, destinada principalmente a los usuarios de la organización y sus familiares, pero también abierta al público en general.
Aexpainba trabaja con personas con discapacidad intelectual límite y ligera y con sus familiares. Según explica su presidenta, Magdalena Moriche, “dentro de la discapacidad intelectual hay diferentes niveles: está el límite, ligero, medio, grave y profundo; las personas con inteligencia límite están en tierra de nadie, puesto que no se encuentran en el mundo de la normalidad como tal, ni en el mundo de la discapacidad, siendo el grupo más desfavorecido e invisible para el sistema”. De hecho, es la única entidad que trabaja de forma específica con estas personas en Extremadura, dando servicio actualmente a más de 200 usuarios.
La conmemoración ha coincidido con la celebración del día del centro que la entidad tiene en Badajoz, y durante toda la jornada se han sucedido actividades diversas, como talleres de efectos especiales, de maquillaje y de baile; una zona compuesta por tres photocalls para hacer simulaciones de carteles de películas famosas; un concurso de talentos; o la actuación de un Dj, entre otras.
Entre las autoridades que han asistido a la celebración se encontraba el consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura en funciones, José María Vergeles, quien ha felicitado a la entidad por su trabajo durante estos 25 años favoreciendo la visibilidad social de sus usuarios.
También ha definido a la inteligencia límite como una condición de vida: “es nacer con capacidades distintas, no llegar al estándar estadístico que se tiene en el coeficiente intelectual, pero son personas que conservan la capacidad de afecto, de interacción social, la necesidad de inclusión en el mundo laboral, de tener un proyecto de vida, de acceder a una vivienda, etc.”.