En la noche del pasado viernes, tal y como NO estaba previsto, tuvo la lugar la celebración de la ya tradicional (en su séptima edición) Velada literaria bajo la luz de la luna, en el salón de actos de la Casa de la Cultura de Valdelacalzada, lugar al que los miembros de la Asociación Vecinal Valviense, organizadora del evento, se vieron obligados a recurrir a causa de la adversa climatología con la que el inicio del verano nos está sorprendiendo.
En un salón de actos prácticamente lleno los poetas invitados, el segureño Fernando Garduño y el segedano José Manuel Díez (‘Duende Josele’), no defraudaron a los asistentes, regalándoles una pequeña muestra de la ingente producción literaria que ambos llevan a sus espaldas y que los convierten en unos de los mejores y más reputados poetas del panorama literario regional.
La música, en esta edición, ha contado con la participación de ‘Bolero Inmortal’, un dúo de reciente creación integrado por nuestro conocido, admirado y participante en alguna edición más, Pedro Monty y la cantante Amalia Toboso. Ambos nos deleitaron con unas impecables interpretaciones de temas conocidos (‘Moon River’, ‘Bésame mucho’, ‘Vivir’ o ‘Gracias a la vida’, entre otros) que hicieron las delicias de todos los asistentes. Como broche final de la velada se les unió, ahora sí, ‘Duende Josele’, para interpretar ‘Virgen de las Ausencias’, uno de los temas más conocidos del poeta y compositor zafrense.
Casi tres horas de recital literario y musical que la gente supo agradecer con más que merecidos y largos aplausos y felicitaciones particulares a cada uno de los participantes, que estos acogieron con cariño, simpatía y alguna que otra foto para el recuerdo.
Desde la organización, nuestro más sincero agradecimiento a todos ellos, porque brillaron a un nivel más que respetable; a todo el público asistente, que no dudó en desafiar a una tarde tan inesperada como aciaga; al Ayuntamiento y, en particular a su alcalde, Fran Hormigo, por la colaboración y la total implicación que desde el principio ha mostrado para que esta séptima edición de nuestra velada literaria pudiera lucir de la forma que lo hizo; y, por supuesto a todos y cada uno de los miembros de la Asociación Vecinal Valviense, que en un tiempo record lograron reubicar el acto y reconducir, previo aviso por telefonía y redes, a todas las personas que iban llegando a la calle san José, lugar originario en el que se iba a desarrollar la velada bajo la luna, pero que al final hubo de conformarse “bajo la luz de unos focos, no más”, aunque lo importante es que finalmente pudo celebrarse y que las numerosas personas que respondieron a la invitación pudieron disfrutar de una noche diferente, mágica y rica en sensaciones y experiencias compartidas.