En este tiempo estival me permito hacer una reflexión divertida y ligera, o no tanto, sobre el universo pyme y el juego online al que llevo jugando casi cinco años, Pokémon Go.
Pokémon Go engancha. Empecé a jugar por obligarme a caminar, pero poco a poco el gusanillo de ir subiendo niveles se apoderó de mí. El universo pyme, para los que estamos enamorados de nuestra empresa, engancha, y siempre hay algo que mejorar, un nivel que subir.
Pokémon Go no te permite acceder a todo desde el inicio; según vas subiendo de nivel y adquieres más puntos de experiencia te va dando acceso a nuevas funcionalidades. En el mundo pyme, según creces vas siendo consciente de otras maneras de hacer las cosas, otros objetivos a los que aspirar.
Pokémon Go enseña a tener paciencia y a gestionar tareas que conllevan más de un día de realización. Al principio (creo recordar que hasta el nivel 10) puedes plantearte un nivel al día, pero después se produce un salto cualitativo que te obliga a tener paciencia y a plantearte objetivos intermedios. En el mundo pyme, según creces los objetivos son mayores y necesitas más plazo para alcanzarlos. Plantearte objetivos intermedios a más corto plazo, como parte de ese objetivo final, es fundamental.
En el juego, a través de esfuerzo y dedicación, acumulas puntos de experiencia que te permiten capturar a Pokémon más difíciles. En el universo pyme, la experiencia te permite ir acometiendo tareas de mayor envergadura.
Todas las semanas descubrimos novedades en el entorno que nos rodea. Hay reglas del juego que cambian. Algo parecido a lo que ocurre con la legislación que afecta a las empresas en el mundo pyme, por no hablar del mundo en sí mismo.
Todas las semanas nos informan de cambios en el futuro, incluso con detalles bastante minuciosos, anticipándolos. Los jugadores a veces encuentran brechas o efectos secundarios no deseados y los ponen de manifiesto. Los creadores suelen corregir cosas o compensarlas. Esto me recuerda a las nuevas cuotas de autónomos en el mundo pyme.
Es necesario leer los blogs de noticias para encontrar pistas de cómo conseguir determinadas cuestiones. En el universo pyme estar al tanto de la legislación es imprescindible.
El trabajo constante (cazar Pokémon, girar discos en las Pokeparadas, combatir en gimnasios, participar en incursiones…) suele dar frutos y proporcionar recompensas, aunque a veces encuentras listillos que se saltan las normas y consiguen más y mejores premios; solo en ocasiones son detectados y se los ‘banea’. Nada qué decir sobre su paralelismo con el mundo pyme.
Al crecer surgen retos que no puedes abordar tú sola y para los que necesitas a otros entrenadores Pokémon: las incursiones para capturar Pokémon Legendarios. En el mundo pyme cada vez son más necesarias las colaboraciones entre empresas para alcanzar metas comunes o abordar proyectos mayores.
La definición de éxito la marcas tú, y es infinita: conseguir un Pokémon macho y hembra de cada especie, tener un Pokémon variocolor de cada tipo con una buena valoración, conseguir tener ‘x’ Pokémon con una valoración 100%, alcanzar el máximo nivel… En el mundo pyme pasa igual. El éxito será para ti alcanzar aquello que te hayas propuesto como objetivo, y puede diferir de lo que constituya el éxito para otras pymesarias o pymesarios.