La localidad cacereña de Galisteo está situada junto a la confluencia de los ríos Jerte y Alagón, en medio de dos importantes ciudades monumentales como Plasencia y Coria, villas históricas de la provincia de Cáceres.
Galisteo ha sido declarada Conjunto Histórico Artístico como consecuencia de la buena conservación de muchos de sus encantos históricos, especialmente de origen medieval.
El ábside mudéjar que se puede ver en Galisteo se sitúa anexo a la iglesia de Santa María de la Asunción, que se construyó en el siglo XIII en el extremo oriental de la villa, junto a la puerta de Santa María. Es de esta época su cabecera de ladrillo. Se trata de un caso típico del románico mudéjar castellanoleonés, estilo bastante abundante en la cercana provincia de Salamanca.
El ábside tiene dos pisos superpuestos de arcos murales de ladrillo. El inferior se apoya en el muro de mampostería citado, constituido por arcos doblados, mientras que el superior tiene arcos sencillos. Encima corre un típico friso de ladrillos en esquinilla. La nave se rehízo en el siglo XVI, al acometer la ampliación general, y se cambió la orientación, de tal modo que los pies se sitúan al sur y la nueva cabecera al norte. La fachada principal es de ladrillo, clasicista, con puerta adintelada y frontón.