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La delegada de Cultura y Bibliotecas del Ayuntamiento de Mérida, Silvia Fernández, ha mantenido una primera reunión preparatoria con los libreros de la ciudad, así como con editoriales y agentes culturales con la vista puesta en mejorar la próxima Feria del Libro, que llegará a su cuadragésima edición.
Será un certamen que contará con más casetas y espacio para las librerías, así como también más amplitud para los espacios infantiles y sus actividades. Se celebrará en primavera, en fechas todavía por determinar, y se prolongará de miércoles a domingo, ampliando los días con respecto a la edición del año pasado.
“Desde la Delegación de Cultura y Bibliotecas seguimos apostando por encuentros con el sector que fomenten el debate y el intercambio de buenas prácticas con el objetivo de contar con todos y continuar con los compromisos que acordamos en la última reunión de valoración de la feria”, ha explicado Silvia Fernández.
“Vamos a ver cómo funciona la feria en el Templo de Diana pero en otra época distinta a la del año pasado, que vino marcada por la pandemia; estamos planeando cómo mejorar espacios, cómo atraer al público infantil y más novedades para que la Feria del Libro de Mérida siga siendo un referente del panorama cultural en la región”, ha añadido.
“Continuaremos con la línea estética que marcamos el año pasado, que tuvo mucha aceptación y encajaba en el espacio monumental; queremos sumar entre todos y ayudar al sector”, ha concluido.
