El derecho de desistimiento de un contrato es la facultad del consumidor y usuario de dejar sin efecto el contrato celebrado, notificándoselo así a la otra parte en el plazo establecido legalmente para ello, sin necesidad de justificar su decisión y sin ningún tipo de penalización.
En este sentido, serán nulas las cláusulas que impongan al consumidor y usuario una penalización por el ejercicio del derecho de desistimiento; además, cuando por ley el consumidor y usuario tenga derecho a desistir, el empresario deberá informar por escrito de una manera clara de dicho derecho, de sus requisitos y de sus consecuencias.
Si el empresario ha cumplido con las obligaciones de informar por escrito de una forma clara y conforme establece la ley sobre el derecho de desistimiento, el plazo mínimo del que disponen los consumidores y usuarios para el ejercicio del derecho de desistimiento es de 14 días naturales, y dicho plazo se computará, generalmente, desde la recepción del bien objeto del procedimiento.
En el caso de que el empresario no hubiera cumplido la obligación de información sobre el derecho de desistimiento, el plazo para el ejercicio de este derecho finalizará 12 meses después de la fecha de expiración del periodo de desistimiento inicial, a contar desde que se entregó el bien.
En todo caso, el empresario debe devolver las cantidades abonadas por el consumidor y usuario sin retención de gastos, sin demoras indebidas y siempre sin que hayan transcurrido 14 días naturales desde la fecha en la que se informara al empresario de la decisión del desistimiento.
Es muy importante cumplir con este plazo de devolución de cantidad, dado que, si transcurrido dicho plazo no se ha reintegrado el importe, el consumidor y usuario podría reclamarlo en cuantía duplicada, y además podrá solicitar una indemnización por los daños y perjuicios que se le hayan podido ocasionar.