Foto: Eduardo Sierra
Tristes días de marzo
“Tristes guerras / si no es amor la empresa. / Tristes guerras”. Tristes versos los del poeta Miguel Hernández, siempre hermosos y dolorosamente vivos. Patrias, banderas, historia, imperios… todo eso no vale nada, absolutamente nada, si el precio a pagar son vidas humanas. Siempre son los pueblos los que pagan los delirios de algunos gobernantes. Y siempre son los pueblos los que dan lo mejor de sí mismos para ayudar a quienes no son más que victimas que podríamos haber sido cualquiera de nosotros.
Apelamos desde aquí, de nuevo, a la más que demostrada solidaridad del pueblo extremeño. Ahora son los ucranianos que se defienden y los rusos a los que se envía a sacrificarse los que nos necesitan. Cualquier oenegé puede canalizar nuestra ayuda: Cruz Roja, Medicus mundi, Mensajeros de la paz son un ejemplo, pero hay muchas más. Ayudémoslas.
Nuestro perfil lo ocupa un extremeño de los que hace patria con la cultura, con su música y su afán de superación. Se llama Rafael, le llamamos Nando Juglar. Lean la entrevista, es una delicia.
En ‘Primera Fila’ rendimos justo homenaje a los 25 años de tarea de ADMO, la Asociación extremeña para la donación de médula ósea, una labor impagable en favor de las personas, siempre las personas.
La fotografía, el motor, el arte, el periodismo, la historia, las consultas legales también tienen su hueco en este magazín que pretende ayudarles, un mes más, a ampliar conocimientos y a desarrollar su opinión propia.
Y no olviden, en estos tiempos tristemente convulsos, informarse. Huyan de la desinformación, de las mentiras y del vergonzoso espectáculo de la guerra presentada como una película de acción. No es ficción, es horror. El horror que nos cuentan cada día los periodistas que realizan una tarea honesta sobre el terreno. Que dan testimonio directo. Son nuestros ojos y oídos. Vaya para ellos y ellas nuestro reconocimiento.
