Logo revista Grada
Buscar

Gran Premio de España. La mejor carrera y un caos fuera de la pista. Grada 168. Mamen Vázquez

Gran Premio de España. La mejor carrera y un caos fuera de la pista. Grada 168. Mamen Vázquez
Foto: Cedida
Léeme en 9 minutos

Un año atípico que esperemos no se repita

Todos los años, nada más llegar a mi tierra tras los 1.200 kilómetros que me separan de Montmeló me gusta hacer una crónica de lo allí vivido durante el Gran Premio de Fórmula 1, tanto a nivel deportivo como a nivel personal. Sobre todo, contar la experiencia para así animaros a que algún año vengáis todos los que amáis este deporte.

SFCarEsta vez no iba a ser menos, aunque lo hago con profunda pena, y creedme de verdad si os digo que me cuesta, y mucho, hacer esto, pero pienso que hay que contar la verdad, aunque nos duela, esperando que sirva de lección para mejorar en lo sucesivo.

Llevaba 16 años consecutivos sin faltar al Gran Premio de España en el circuito de Montmeló hasta que la maldita pandemia cortó con esta racha; este año ha sido el décimo séptimo, y por ello siento un especial y gran cariño por todos y todo lo que rodea al circuito.

Por eso también cuesta tener que contar esto, aunque antes de nada quiero dejar claro que el personal de a pie, los voluntarios y casi todas las personas que han trabajado este fin de semana en el circuito lo han dado todo, y bastante que con la que ha habido han sabido capear el temporal. Esto no va con ellos, porque lo único que tengo es que agradecerles su trabajo y que siempre y en todo momento estuvieran ahí. Aunque siempre hay excepciones que más adelante veréis.

Si empezamos por lo fácil y lo bueno, hay que decir que ha sido la mejor carrera, deportivamente hablando, que he visto desde que asisto a la misma. Lejos de ser una procesión de carrera donde lo interesante solo pasaba durante las cuatro primeras vueltas, roces, salidas, adelantamientos, etc., en esta ocasión ha sido una carrera nada monótona, más bien lo contrario, donde no podías pestañear ni perder un minuto.

Por ahí todo bien, ir enumerando uno por uno los pilotos que, desde los que salían atrás como Fernando, con esa gran remontada donde nos volvió hacer vibrar, pasando por el resto de la parte media y terminando en los que quedaron primeros, gran carrera y mejor espectáculo digno de agradecer, y más habiendo pasado lo que ahora os voy a contar.

La única objeción es que fue una lástima lo de Carlos, pero estoy segura, y apuesto por ello, que de esta se repondrá y una vez termine de dominar su coche volverá. No hay más que recordar que algo parecido ya pasó la temporada pasada y finalmente terminó por delante de su compañero Leclerc; así pues, tranquilos que volverá, solo hay que tener un pelín de paciencia, está claro que le está costando adaptarse a este nuevo coche, más hecho para el estilo de conducción de Leclerc, pero tarde o temprano llegará.

Con respecto a la logística y todo lo relacionado con la organización fuera de lo meramente deportivo, ha sido un fin de semana nefasto, frustrante, vergonzoso y cualquier calificativo que le pongamos es poco. Muy, muy, pero que muy lejos de lo que ha sido este Gran Premio siempre, un ejemplo a seguir y una organización que solo se ha llevado flores y premios. Un caos total y absoluto que espero no se vuelva a repetir y que tomen nota para que esto sea una excepción, que ya es bastante.

Empiezo por el principio y espero no olvidar nada, pues han sido muchos fallos en unos pocos días. Nada más llegar tuve que preguntar dónde estaba el nuevo camping, ya que al sacar mi entrada de 52 euros para otro sitio distinto al que teníamos habitualmente todos los años, no sabía muy bien dónde ubicarlo. Primer fallo, el agente que estaba en la puerta principal del Circuito me dice que me dé la vuelta porque este año no hay camping; le contesto que sí que lo hay, puesto que lo he pagado y llevo conmigo el justificante. En fin, me ubico según mapa y por fin lo encuentro.

Una vez entro en el mismo me dicen que solo la tienda, y que el coche tiene que ir a otro parking; no doy crédito a lo que veo ni escucho. Todos los años que hemos ido de camping con nuestra tienda hemos tenido que tener la precaución de guardar la mayoría de las cosas, menos colchón y saco de dormir, en el coche, porque si no te desaparecían, ya que los susodichos saben que nos vamos al circuito por la mañana temprano y no volvemos hasta por la tarde; pero si tienes tu coche en otro parking, a no sé qué distancia, pero corta seguro que no, os imagináis el trastorno, la incredulidad por tal norma.

No contento con ello, le digo que mis amigos que vienen de otro sitio traen autocaravana y que yo, al estar sola, no traigo tienda y hago cama mi coche; pues me dice que entonces allí no puedo estar. O sea, pago 52 euros para irme a un parking lejos de mis amigos y vivir y dormir allí los cuatro días sola. Sigo alucinando. O sea, que pago 52 euros por aparcar mi coche. Suma y sigue.

En ese momento llega una persona encargada, a la cual agradezco su comportamiento hacia mi persona, y, en un intento de ayudarme (daros cuenta, ayudarme después de pagar 52 euros por la reserva), me dice que, a modo de favor, repito ‘de favor’, me va a dejar que me vaya a la zona última que han incorporado para ampliar el aforo, donde solo van autocaravanas, y, menos mal, algo bueno, es allí donde están mis amigos, los cuales pagaron aún más que yo, 65 eurazos. Ante tal situación me dispongo a buscar ese otro sitio donde se supone que voy a pasar mis cuatro días y tres noches.

Lo primero es el tiempo que tardé en dar con ello, además de no estar del todo bien señalizado y tampoco preparado aún, ya que pasé por su lado en varias ocasiones, pero viendo el sitio en ningún momento se me pasó por la cabeza que aquello fuera donde nos íbamos a quedar; acompaño foto para acreditar todo lo que estoy contando.

Una vez doy con el sitio me quedo sin palabras ni calificativos, me vengo abajo, alucino, no doy fe a lo que mis ojos están viendo. Es un cacho de terreno que más parecía un desierto, con los bordes sin desbrozar y lo que ello conlleva en la cantidad de animalitos por allí, un olor nauseabundo, y cuando nos empezaron a atacar los moquitos remataron.

Llegué la primera, era jueves cerca de mediodía, y aún estaba todo sin preparar, o eso es lo que yo pensaba, porque vi tan solo cuatro WC y contenedores de basura, y no me podía creer que eso fuese todo lo que iba a ver. Más tarde llegaron unos señores a dibujar en blanco las parcelas, pero para más inri resulta que llega otra persona y se da cuenta de otro detalle, que estábamos justo debajo de la autovía, con lo que, además del gran ruido que había, corríamos el riesgo de que, si alguien se salía de la carretera, fuera a parar justo debajo, donde estábamos nosotros. Vamos un cacho campo, con cuatro WC, sin duchas, sin lavabos, etc., todo un camping de último modelo, nada menos que por 65 euros.

Foto: Cedida
Foto: Cedida

Una vez se nos pasó el mosqueo intentamos que no nos influyera para pasar un finde amargado y poder disfrutar del resto. Nos fuimos apañando como podíamos y sobre todo ayudándonos unos a otros. Pero mi sorpresa no quedó ahí, porque conforme fueron pasando los días hemos ido pasando por cosas, y más que nos han ido contando, que hacían que no supieses si era un sueño, o mejor dicho una pesadilla, o es que de verdad estaba pasando.

A modo de resumen, hora y media de cola para entrar en el circuito, con unos calores impresionantes, incluso gente que ha intentado entrar por otra puerta y tras el tiempo de espera le dicen que por ahí no y la mandaban a otras puertas.

Te abrían las mochilas y todos muy bien, salvo algún chulito que dejaba mucho que desear con el trato a la gente que ha pagado un dinero para entrar y ha estado a pleno sol hora y media esperando para ello; en fin, mejor ese personaje obviarlo.

Un inciso; a todo esto, en el largo rato de espera en las colas, en los puestos que hay fuera ni se te ocurre tomar una cerveza, ‘cuidadín’, porque a alguien muy cercano a mí le cobraron nada menos que 15 euros por una birrita. Increíble pero cierto.

Una vez dentro, colas de hora y media mínimo para todo, si querías comprar algo, o bien beber agua fresca, que por cierto en muchos momentos y tras una hora o más de espera en la cola llegas y te encuentras que te clavan 4 euros por una botella pequeñita y que te la dan caliente, porque fría ya no queda, y no digamos hielo, eso brilló por su ausencia.

Foto: Cedida
Foto: Cedida

Más horas de espera para poder entrar en los baños, para poder mojarte un poco, para comer, etc. Por último, según me han contado, el mismo caos ha sido para acceder al circuito en coche, horas y horas de caravanas y esperas, a unos ni les pedían pases, a otros los mandaban a otro parking a pegarse otra vez más horas de espera.

Otro detalle del que nos dimos cuenta fue que, aún no sabemos por qué, si al lado del circuito hay un polígono, el cual los findes, ya que no se trabaja, está vacío y con mucho sitio para aparcar, por qué mandaron a alguien a cerrar con una valla el acceso para que nadie pudiera aparcar allí, obligando con ello a entrar en las zonas de parking y pagar los 25 o 30 euros correspondientes. Suma y sigue, y cada vez dando menos crédito a los que mis ojos veían y mis oídos escuchaban.

A todo esto tenemos que añadir que, lógicamente, con esos calores y en estas circunstancias ha habido muchas intervenciones por personas con colapso de calor y otros derivados de la situación, sin poder acceder ni a la sombra, ni a agua fresca, ni a mojarse, ni al baño, etc. O sin esperar antes para todo ello más de una hora.

Vuelvo a repetir, es una pena y me duele hacer esto, pero si lo hago es para que tomen consciencia y no se repita más. Espero llegar el próximo año y estar en nuestro camping donde siempre, con nuestro césped, nuestra sombra y con todos los servicios mínimos vitales como baños, duchas, etc.

Y que a la hora de entrar haya la misma organización ejemplar que hemos tenido siempre, y que esto tan solo haya sido una pesadilla de la que, por supuesto, soy la primera no me gustaría volver a acordarme.

Como ejemplo pongo el 2007, cuando se batieron todos los récords de asistencia, nada menos que con 140.000 espectadores, y os puedo asegurar que mejor imposible, todo impecable. Pero este año, no sé si es que han querido ahorrar para recuperar lo perdido tras dos años y unos test a puerta cerrada, o es que han cambiado de personas que organizan esto, o más bien un poco de todo.

No me extiendo más, que ya es bastante; habría más tela que cortar, pero creo que con esto es suficiente para que tomen conciencia los responsables e intenten por todos los medios que esto no se repita.

No pedimos nada extraordinario, simplemente que lo hagan como venían haciendo hasta ahora, y si los responsables y algunos más han cambiado y han pretendido con ello también cambiar la política de todo este entramado, ya están llamando a los anteriores para pedir consejo, porque si no hacen algo esto puede acabar muy mal. De hecho, hubo mucha gente que se fue con ganas de no volver y eso no puede ser. Amén de que la FIA es consciente de todo ello y la primera en dar el toque.

Fotos: Cedidas
Fotos: Cedidas

Al resto, incluidos mis amigos, gracias por la ayuda, por el cariño y por todo lo que me han dado en estos días, como siempre vengo llena de satisfacción y amor.

Más fotos

Desde Extremadura con amor para nuestros dos grandes pilotos, Fernando Alonso y Carlos Sainz

ENTRADAS RELACIONADAS

#15AñosConectando El jueves 13 de junio de 2024 se entregará la décimo quinta edición de los Premios Grada, con su...
El alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, y el presidente de la Unión de cooperativas de trabajo asociado de Extremadura...
En torno a 200 mujeres ejecutivas y directivas se han implicado en el proyecto WITH en Extremadura con el objetivo...
La Confederación Regional Empresarial Extremeña (Creex) y el Ministerio de Defensa han suscrito un acuerdo con el objetivo de promover...
La provincia de Badajoz se incorpora a la segunda edición de Ineco RuralTIC, el programa de digitalización del mundo rural...
Caja Rural de Extremadura ha suscrito un convenio de colaboración con la Asociación nacional de criadores de cerdo ibérico (Aeceriber)...

LO MÁS LEÍDO