El convenio de colaboración firmado en 2019 entre la Diputación de Badajoz y el Arzobispado Mérida-Badajoz ha culminado de manera satisfactoria tras alcanzar una inversión de 400.000 euros.
Este convenio tenía por objeto la contribución a la función social que representan las edificaciones pertenecientes al Arzobispado, como lugares de culto, y la preservación del importante patrimonio histórico y cultural de la provincia en manos de la Iglesia.
Así, los edificios religiosos forman parte de uno de los atractivos turísticos del rico patrimonio provincial, siendo el turismo patrimonial y cultural una de las estrategias de desarrollo y planificación estratégica de la provincia de Badajoz.
Durante estos meses el Área de Fomento de la Diputación y el Arzobispado han trabajado, de forma coordinada, en la conservación de templos y retablos parroquiales de ocho municipios pacenses de menos de 20.000 habitantes. Concretamente se ha actuado en el templo Nuestra Señora de Perales de Arroyo de San Serván, en la ermita de los Remedios de Magacela, en Oliva de Mérida, en el retablo del Calvario de San Vicente de Alcántara, en la parroquia de Nuestra Señora de Gracia de Talavera la Real, en la torre de la iglesia Nuestra Señora de los Milagros de Quintana de la Serena, en la iglesia del Rosario de Zafra, y en la Real Capilla del Santísimo Cristo de la Quinta Angustia de Zalamea de la Serena.