En el término de Campo Lugar se han localizado restos romanos. En el siglo XIII, y con motivo del reparto de territorios que trajo consigo la Reconquista, se denominó ‘El Campo de Alcántara’, haciendo honor a la Orden a la que correspondía esta tierra.
El ejido de Campo Lugar aparece como tal en documentos de finales del siglo XV1. Este nombre va a definir a la localidad hasta la primera mitad del siglo XX, momento en el que, tras haber pasado a ser una villa con señor propio, se llamará ‘El Campo’.
En el siglo XVIII figura como señor de las Alcabalas del Campo don Francisco José de Mendoza Sotomayor, de la casa de los Mendozas, marqueses de San Miguel y condes de Quintanilla2.
A este nombre ambiguo, que creaba más de una confusión, máxime tras el desarrollo de las comunicaciones, se le añadió ‘lugar’, y así quedó definitivamente su nombre como Campo Lugar.
Fue un pequeño lugar de la tierra de Trujillo y jamás se eximió de su jurisdicción. La parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles es una sencilla construcción de nave única con capillas laterales, de finales del siglo XV.
El púlpito es un magnífico ejemplar de los inicios del siglo XVI; se sostiene sobre un fuste troncopiramidal que, a su vez, sostiene una taza con abundante decoración vegetal de esquemáticas hojas y franjas de triángulos y los paneles del púlpito, que une la gravedad elegante de los planos verticales de los follajes antiguos, dando lugar a un sentido de los contrastes luminosos que evoca el arte de los encajes en una clara composición simétrica. Lo más importante de los paneles es la decoración compuesta y las palmetas que se reparten por los paneles del púlpito, todos los intervalos están llenos. Los adornos filomorfos de la base que constituyen los motivos decorativos están hasta tal punto estilizados que casi se reducen a esquemas abstractos, y la hilera superior que remata el conjunto está decorada con flores de siete pétalos y tréboles.