Un nombre muy peculiar entre nuestros antepasados por sus características es el de Goutius o Coutius. Su distribución geográfica, concentrada principalmente en la provincia de Cáceres y también con extensiones hacia los distritos portugueses de Castelo Branco, Viseu y Évora, parece indicar que era un nombre lusitano.
Los testimonios más numerosos en tierras cacereñas se documentan al norte del Tajo, en las localidades de Oliva de Plasencia (la antigua Capera), Navaconcejo, Coria y Cuacos de Yuste. Al sur del río aparece en Mata de Alcántara, Ibahernando, Santa Cruz de la Sierra, Villamesías y Deleitosa. Este antropónimo presenta algunas variantes y a veces aparece en su versión hipocorística (cariñosa), como Goutino-Goutina en Cuacos de Yuste e Ibahernando respectivamente.
En la foto que acompaña al texto se presenta una interesante inscripción en el que se menciona este curioso nombre. Se trata de un bloque de granito de forma rectangular, correspondiente a un monumento funerario.
En dicha inscripción un individuo llamado Albino homenajea a su esposa Duatia, que era hija de L. Goutio, y a su hija L. Goutina.
Aunque no es una norma estricta, en época romana era frecuente que los hijos varones tomaran el nombre de línea paterna y las mujeres de la materna. Así sucede en este epitafio, en el que la difunta L. Goutina aparece con el diminutivo de su abuelo materno.
Todo parece indicar que Duatia procedía de un ambiente servil. La propia alusión a su testamento ‘libre’, que reafirma con esta expresión el cambio de estatus, así parece confirmarlo. L. Goutina sería fruto de una unión anterior y, tras el matrimonio de su madre con Albinus, fue acogida por este.