En la vecina localidad de Guadiana, en pleno corazón de las Vegas Bajas, me han comentado que uno de los suyos acaba recientemente de publicar una novela fantásticamente recibida por la crítica y que tiene una trama muy recomendada para lectores curiosos y amantes de la intriga y de la investigación policial. Solo os adelantaré que al medio de todo se encuentran los servicios secretos de El Vaticano. Con eso os lo digo todo.
Me pongo manos a la obra y, grabadora en mano, allá que me voy en busca de Juan Manuel Gordillo González (aunque para el marketing literario prefiera quedarse como Juan Gordillo, no más) que muy amablemente me cita en su propia casa y desde su bonito estudio me invita a disfrutar de unas fenomenales y relajantes vistas al pueblo, a su Guadiana natal.
‘Huella de Sangre’ (Editorial Avant) es el título de esta ópera prima que vio la luz en diciembre del pasado año y que, como señalaba anteriormente, está teniendo una más que aceptable acogida por la crítica literaria de nuestra región e incluso con cierta proyección nacional e internacional.
Me cuenta Juan que desde muy pequeño sentía auténtica pasión por los libros, por los cómics (‘El Capitán Trueno’, ‘Jabato’, ‘El Guerrero del antifaz’…) y la lectura en general; incluso recuerda muchos momentos de su infancia jugando con los amigos a fabricar libros con hojas de papel que grapaban o cosían, no sé de qué forma, y que les hacía imaginarse como reputados escritores de novelas, relatos e intrigas policiacas. No tiene antecedentes familiares que se hayan dedicado a la escritura y aunque esta novela no es propiamente su primera publicación (tiene algún que otro relato corto publicado en varios concursos literarios y también alguna tímida incursión en el ámbito de la poesía) sí es su estreno en el ámbito de la narración más extensa, en la novela de ficción en este caso.
Todo surge en una visita familiar a la ciudad de Coria y, más concretamente a la Catedral cauriense y a su Museo Catedralicio, que alberga una de las reliquias más importantes para la cristiandad, el Sagrado Mantel de la Última Cena. Me confiesa Juan que cuando entró en aquella sala y se encontró ante el Sagrado Mantel sintió algo muy especial. Fue, precisamente, ese momento el que supuso el espaldarazo que necesitaba para ponerse manos a la obra con algo que llevaba tiempo mascullando y, no se hable más, inmediatamente se puso con ello, y hasta ahora.
De hecho, una de las cosas más curiosas e interesantes que desde entonces ha realizado ha sido una visita guiada a Coria, con muchos paisanos y lectores en general en la que tuvo ocasión de explicarles los escenarios reales en los que se ambienta su novela. ¡Un lujo, la verdad!
‘Huella de Sangre’ nos narra cómo “el Sagrado Mantel de la Última Cena, una reliquia única en el mundo, cuya procedencia es un misterio, desaparece del Museo de la Catedral de Coria (Cáceres) en extrañas circunstancias. La compañía aseguradora asigna el caso a una investigadora y, a su vez, el Vaticano envía a uno de sus mejores hombres, un oficial de la Guardia Suiza, pero los intereses de la Santa Sede nada tienen que ver con los de la compañía de seguros. Comienza así una intensa búsqueda a través de un peligroso entramado en el que la vida carece de todo valor cuando lo que está en juego es el mayor secreto de la cristiandad, un misterio que podría hacer tambalear los pilares de la Iglesia y cambiar el rumbo de la humanidad” (sinopsis en la contraporada). Un guion que, ya os adelanto, promete, engancha y deja al lector más que satisfecho con el desenlace final. Una novela muy rumiada, con una concienzuda elaboración que le ha llevado más de cinco años hasta que por fin pudo ver realizado el sueño que mascaba desde hacía muchos años, publicar su propia novela.
Como proyecto más a largo plazo y estando relativamente próxima su pase a segunda actividad (él pertenece al Cuerpo Nacional de Policía), su deseo es poder dedicarse íntegra y exclusivamente a la escritura. Toda la experiencia de vida que atesora fruto de haber vivido y trabajado en numerosas ciudades españolas, sus repetidas visitas a ciudades europeas y del resto del mundo le capacitan para poder crear relatos con inusitada facilidad y, además, poderlos situar en escenarios reales y conocidos por el autor. De hecho, el mismo día en el que yo le realizo esta entrevista acababa, como quien dice, de aterrizar de un vuelo procedente de París, ciudad en la que ha estado investigando y recopilando información y documentación que, a buen seguro, utilizará en la próxima entrega de ‘Huella de Sangre’.
Tras leer ‘Huella de Sangre’ no puede uno pasar de largo las influencias que ‘pesan’ sobre nuestro autor y que nos evoca a grandes autores de la novela de ficción e intriga, como Dan Brown, Ken Follet, Matilde Asensi o Julia Navarro; a esta última me dice Juan que tuvo ocasión de conocerla en la Feria del Libro de Madrid y cuya conversación recuerda con mucho cariño. A modo de anécdota, me comenta que alguien lo piropeó, con cierto gracejo, denominando a su novelacomo “El Código Da Vinci extremeño”; todo un halago, claro que sí. No olvida decirme también que durante varios años el escritor Alberto Vázquez Figueroa, novelista, periodista e inventor español, autor de más de cien libros y uno de los autores contemporáneos más leídos en España y en el mundo, fue quien ocupó gran parte del tiempo que Juan dedicaba a la lectura.
Bueno, amigo Juan. Ha sido un auténtico placer poder tener esta conversación contigo. Te estoy muy agradecido por haberme abierto las puertas de tu casa y, por supuesto, te deseo un enorme éxito con tu nuevo proyecto que yo, por mi parte, estoy deseando tener en mis manos, no voy a contar nada más.
Lo dicho, todo un placer, amigo.