La Fundación La Caixa ha presentado un informe, a partir de los datos obtenidos de la estadística de flujos de la población activa del Instituto Nacional de Estadística, que demuestra que en verano las mujeres pasan de la ocupación a la inactividad en mayor medida que los hombres.
De hecho, muchas mujeres pasan a la inactividad para conciliar su tiempo con las necesidades de su familia. Esto puede tener distintas consecuencias negativas para ellas en el ámbito laboral como una menor proyección profesional, unas peores perspectivas de salario, y un futuro laboral menos seguro.
El informe ha sido elaborado por Almudena Moreno, Raquel Llorente y Diego Dueñas, y se trata de uno de los proyectos seleccionados en la convocatoria para incentivar la divulgación de la investigación en ciencias sociales.
Entre 2010 y 2019 las mujeres que pasaron a la inactividad representaron un promedio de 325.730 mujeres en el tercer trimestre del año, por 220.260 hombres. Así, lo que parece una solución al problema de la conciliación familiar se convierte en una decisión ineficaz, ya que se genera un mayor problema a largo plazo, se producen interrupciones laborales en el colectivo femenino y se reduce el salario real y potencial de las mujeres.
La ineficacia de esta solución se sustenta en el hecho de que las mujeres que dejan el mercado laboral en verano tienen un mayor bagaje profesional que los hombres que pasan de la ocupación a la inactividad.